En la agenda del Congreso de los Diputados de esta semana no consta todavía la reunión de la Mesa que debe celebrarse el jueves. Una cita en la que se abordará la iniciativa que registró Junts para presionar el PSOE ante los incumplimientos de sus acuerdos, una proposición no de ley (PNL) que exige al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que se someta a una cuestión de confianza.
Las dos formaciones mantienen abierta la negociación para la delegación integral de las competencias de inmigración a la Generalitat. Este fin de semana seguían intercambiando propuestas para tratar de deshacer la madeja en que se ha convertido este traspaso. Ambas afrontan una semana clave para la legislatura.
Es habitual que en los videojuegos haya que alcanzar algunos hitos para desbloquear el paso al siguiente nivel o la siguiente pantalla. Con la legislatura sucede algo similar. Para abordar cuestiones como los presupuestos generales del Estado es preciso que antes se desencallen otros asuntos. Junts lleva semanas advirtiendo sobre ello: Sin una compensación económica a modo de condonación de la deuda autonómica del FLA o bien con una transferencia directa a la administración catalana y sin el cumplimiento de los pactos previos, no habrá negociación presupuestaria. En ese último apartado figuran cuestiones como la oficialidad del catalán en la Unión Europea, para la que los posconvergentes demandan a Sánchez su implicación personal, o el traspaso de inmigración.
Y si hasta ahora solo Junts optaba por esa estrategia negociadora, la nueva dirección de Esquerra quiere transitar en adelante por esa misma vía. El sábado Oriol Junqueras elevó la presión sobre los socialistas al cerrar la puerta a negociar los presupuestos del 2025 de Sánchez y de Salvador Illa. De todos modos, en JxCat señalan que eso no les condiciona y mantienen su rumbo.
Puigdemont se reunirá el viernes en Bruselas con la permanente de Junts para analizar el avance de la negociación
En cualquier caso, para elaborar las cuentas públicas primero hay que aprobar el techo de gasto y los objetivos de déficit. De momento el Gobierno central no ha llevado al Parlamento una nueva propuesta después de que JxCat tumbara la anterior. Para validarla, los posconvergentes exigen un reparto más equitativo del margen de déficit entre las administraciones y hasta la fecha no han recibido noticias de Hacienda.
A todo ello hay que sumar la iniciativa sobre la cuestión de confianza. Para Junts es importante que se tramite. Tiempo habrá más adelante de retirar la resolución, que tiene efectos políticos pero no legales, si las negociaciones entre posconvergentes y socialistas llegan a buen puerto. “Se están pasando todos los límites temporales”, lamentan en JxCat.
Las dos formaciones intercambian aún propuestas sobre el traspaso de las competencias de inmigración al Govern
Carles Puigdemont ha convocado el viernes en Bruselas a la dirección permanente del partido, un mes después de la última cita en la capital belga. Su intención es evaluar el curso de las negociaciones con el PSOE y dar respuesta a lo que decida la Mesa. Con Sumar, los socialistas tienen mayoría y pueden vetar o tramitar la iniciativa. Los letrados del Congreso dejaron todos los escenarios abiertos en su informe, pero en el PSOE hay reservas y JxCat no da el brazo a torcer. “Les incomoda, pero se les ha dicho que se tiene que tramitar”, dicen desde Junts.
Si no se tramita la PNL –según fuentes posconvergentes– la legislatura se puede complicar para el Gobierno, que necesita el apoyo JxCat para configurar una mayoría parlamentaria. “Se pondrá muy feo”, resume un dirigente. Puigdemont ya dijo al respecto que la legislatura podría ir “al colapso” y habló de “consecuencias irreversibles”.
El expresident se pronunció en esos términos el mismo día en que la Mesa chutó el balón hacia delante y dejó el asunto para después de Navidad y cuando se pregunta por la posibilidad de que se tumbe la PNL en JxCat hay quien dice “colorín colorado”. De hecho, el propio Puigdemont, en la última reunión del consejo nacional pidió a los suyos que se preparen para asumir “el coste personal y político” de una eventual ruptura con el PSOE, por si se da ese escenario.
Con todo, fuentes de la formación conceden también que los socialistas se han movido en estas últimas semanas. En su balance de final de año Sánchez dejó la puerta abierta a verse con Puigdemont, tal y como habían pactado hace un año. Una reunión relevante para Junts, que considera ese encuentro como una suerte de “amnistía política” para el líder de la formación mientras el Supremo se la niega. Así pues, hay margen para reconducir la situación. “Una cosa es tramitar la PNL y otra es sustanciarla”, puntualiza una fuente de JxCat, que cree que el PSOE tiene tiempo de seguir negociando después de permitir que la iniciativa siga su curso parlamentario.
JxCat valora los pactos en asuntos del día a día como la fiscalidad, pero desaprueba la cuenta de resultados en los “grandes temas”
Esta situación se deriva de los incumplimientos del Gobierno con los posconvergentes, que están satisfechos con el resultado en algunos asuntos del día a día como la reforma fiscal, cuando se rebajó la tributación para los clubes deportivos o se bajó el impuesto de sociedades para las pymes.
Esa satisfacción, no obstante, contrasta con el disgusto y la desaprobación del balance y la cuenta de resultados en otros asuntos. “En los grandes temas”, resume un dirigente.