El pasado sábado Ferrero International S.A. advertía sobre la retirada de algunos lotes de huevos Kinder Sorpresa en el Reino Unido e Irlanda por su posible vínculo con un brote de salmonella que, según asegura la BBC, ya ha afectado a 63 personas, la mayoría niños de menos de cinco años.
Lo hizo a través de un comunicado, en el que pide a sus clientes que por precaución se abstengan de consumir los famosos huevos de chocolate en formato de 20 gramos o en paquetes de tres si presentan fechas de caducidad entre julio y octubre de 2022. Todos estos productos se fabrican en la misma fábrica en Arlon, Bélgica.
No se han reportado muertes relacionadas con este brote de 'salmonella'
Según informa la FSA, desde Ferrero están trabajando con las autoridades sanitarias de estos países para identificar la causa del brote, del que todavía no se ha reportado ninguna muerte, pero sí ha comenzado a afectar más allá de las fronteras del Reino Unido e Irlanda.
En Francia, ya se han notificado 21 casos de salmonella y la mayoría afectan a niños de una media de 4 años. 8 de ellos, informan desde el Ministère des Solidarités et de la Santé, fueron hospitalizados, pero ya han regresado a sus hogares.
Las investigaciones del Ministerio también han revelado que 15 de las personas afectadas habían tomado productos de Kinder los días previos al inicio de los síntomas, según la información de la que disponen por el momento. Confirman, asimismo, que estos casos de salmonelosis tienen la misma cepa genética que la del brote del Reino Unido e Irlanda.
Alemania, Suecia y Holanda son los otros países de la Unión Europea que han detectado casos de salmonelosis entre su población. De momento, no ha sido así en España.
Desde Ferrero han pedido disculpas, aunque también señalan que ninguno de sus productos de Kinder puestos a la venta ha dado positivo por salmonella. "Nos lo estamos tomando extremadamente en serio, ya que la atención al consumidor es nuestra principal prioridad", sigue el comunicado.
De momento, España no ha notificado ningún caso
La salmonelosis es una infección provocada por bacterias del género salmonella, una de las intoxicaciones alimentarias más comunes y extendidas. Según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), se asocia principalmente al consumo de alimentos como huevos y productos a base de huevo crudo o poco cocinados, carne cruda o poco cocinada, especialmente de aves de corral, así como leche y productos lácteos no sometidos a tratamientos que eliminen la bacteria.
Los síntomas más comunes son la aparición de fiebre brusca, dolor abdominal, diarrea, náuseas, vómitos, cefalea o mialgias, que aparecen entre 6 y 72 horas después de la ingesta de los alimentos contaminados.