¿Qué es la salmonelosis? | Síntomas, causas y cómo tratar la enfermedad

ENFERMEDADES

Intoxicación alimentaria

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ilustración de la bacteria 'Salmonella enterica'. La salmonela es una de las principales causas de intoxicación por alimentos en los seres humanos, la mayoría de las veces se captura de cerdos, aves y huevos infectados

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La salmonelosis es una infección por ‘Salmonella’, una de las intoxicaciones alimentarias más comunes y extendidas. Cada año, según datos de la organización mundial de la salud (OMS) afecta a decenas de millones de personas en todo el mundo, como ocurrió el 7 de junio, precisamente en el día mundial de inocuidad de los alimentos, a nueve personas en Manacor.

Es contagiosa y en la mayoría de los casos los síntomas relativamente leves. Puede que ni siquiera se requiera tratamiento pero en pacientes críticos, como niños pequeños o ancianos, se ven seriamente afectados por la deshidratación que conlleva y puede llegar a causar la muerte.

Causas de la salmonelosis

Infección por la bacteria ‘Salmonella’

La Salmonella es un grupo de bacterias que, por lo general, viven en los intestinos de animales y personas de donde se expulsan a través de las heces. Es omnipresente y resistente y puede sobrevivir durante semanas en un ambiente seco y durante meses en agua. La mayoría de infecciones o intoxicación son causadas por alimentos contaminados como las carnes crudas o no suficientemente cocinadas son producidas por ‘Salmonella enterica’ serotipo ‘Typhimurium’ y ‘Salmonella’ serotipo Enteriditis. ¿Dónde puede haber salmonella? Pues se puede encontrar en:

- Carne de aves crudas o no suficientemente cocinada.

- Huevos.

- Frutas y vegetales sin lavar.

- Carne de vacuno cruda o no suficientemente cocinada.

- Carne de cerdo cruda o no suficientemente cocinada.

- Mascotas: como serpientes, tortugas y lagartos. Es especialmente crítico la limpieza de excrementos de estos animales ya que debe hacerse con las precauciones necesarias para evitar el contacto con la bacteria.

El ácido estomacal tiende a destruir la ‘Salmonella’ por lo que la intoxicación debe ser elevada para desarrollar la intoxicación excepto si hay una deficiencia de ácido gástrico que puede darse en:

- Niños menores de un año.

- Ancianos.

- Personas con el sistema inmunitario debilitado como los afectados por VIH, pacientes trasplantados o pacientes que sigan un tratamiento contra el cáncer.

- Personas que tomen antiácidos o medicamentos que inhiban la producción de estos ácidos como los antihistamínicos como la ranitidina o los inhibidores de la bomba de protones como el omeprazol.

- Afectados por enfermedad intestinal inflamatoria.

- Afectados por trastornos que afecten a los glóbulos rojos como la anemia drepanocítica, trastorno heredado de la sangre por hemoglobina defectuosa, o la malaria.

La salmonelosis puede trasmitirse entre personas. Es contagiosa vía fecal-oral.

Variedades de la ‘Salmonella’ como la ‘Salmonella typhi’ y la ‘Salmonella paratyphi’ causan fiebre tifoidea. Una enfermedad más seria y que es bastante habitual en países en desarrollo.

Síntomas de la salmonelosis

Náuseas, vómitos y diarrea entre otros

Los síntomas de la salmonelosis empiezan a manifestarse trascurridas entre seis y 72 horas después de la ingesta. La crisis suele tener una duración de dos a siete días. Los signos de salmonelosis incluyen:

- Fiebre.

- Diarrea. Puede ser sanguinolenta en ocasiones.

- Náuseas y vómitos.

- Cólicos abdominales.

- Dolor de cabeza.

- Dolor muscular.

- Escalofríos.

La salmonelosis es una de las cuatro enfermedades diarreicas principales a escala mundial y si la deshidratación que producen sus síntomas es grave puede ser grave y poner en peligro la vida. Los signos de la deshidratación son: menor producción de orina, sequedad de boca y lengua, ojos hundidos y disminución de producción de lágrimas.

Semanas o meses después del cese de la diarrea puede presentarse artritis reactiva (dolor al orinar, irritación en los ojos, dolor en caderas, rodillas y tendón de Aquiles).

Si la bacteria pasa a la sangre (bacteriemia), puede provocar infecciones y abscesos de pus en huesos, articulaciones, tracto urinario y pulmones. Incluso pueden acumularse en prótesis articulares, injertos de vasos sanguíneos, revestimiento de arterias, tumores y válvulas cardiacas artificiales. Si se infectan las arterias, como la bacteriemia puede ser crónica.

Diagnóstico de la salmonelosis

Cultivo de heces, pus, sangre o muestra rectal

Aparte del examen físico y descripción de síntomas el médico solicitará una muestra de heces, pus o sangre. También puede obtener una muestra rectal para realizar un cultivo bacteriano para identificar la presencia y tipo de ‘Salmonella’.

Tratamiento y medicación de la salmonelosis

Rehidratación y antibióticos

La mayoría de casos no requieren tratamiento excepto conseguir restablecer el equilibrio de líquidos y electrólitos. La ingesta de líquidos es clave en los afectados por salmonelosis para evitar la deshidratación. Los casos graves requieren hospitalización para poder realizar hidratación intravenosa. Si hay riesgo de infección en la sangre, bacteriemia, se prescribirán antibióticos.

Prevención de la salmonelosis

Buena higiene

Las medidas de prevención de la salmonelosis se basan principalmente en:

- Mantener una buena higiene, personal lavándose adecuadamente las manos tras usar el baño, cambiar un pañal, limpiar excremento de mascotas, tocar reptiles o pájaros o manipular carnes crudas.

- A nivel de seguridad alimentaria es clave evitar la contaminación cruzada entre alimentos manteniendo apartados en el frigorífico la carne cruda de vacuno de la de ave y de los pescados. También es clave lavar adecuadamente todos los vegetales (verduras, frutas y hortalizas).

- Para cortar sería interesante utilizar tablas diferentes para cortar carnes y para cortar frutas y vegetales y, si no es posible, lavar bien la tabla y secarla adecuadamente cada vez que se corte un alimento y antes de utilizarla de nuevo.

- Nunca se debe colocar alimentos cocinados en un plato que haya contenido un alimento crudo (carne, huevo crudo…) y no se haya lavado previamente.

- No se debe dejar la comida fuera de la nevera más de dos horas y menos de una si es un día caluroso. La comida debe conservarse en frío lo antes posible.

- Evitar comer huevos crudos (pueden estar en masas de galletas o magdalenas).

- Si se está enfermo no se debe cocinar para otras personas.

- Las encimeras y superficies de trabajo en la cocina deben permanecer siempre limpias, especialmente si se está cocinando.

Es importante tener en cuenta que los alimentos son la base de la energía, la salud y el bienestar del ser humano. Deben estar en óptimas condiciones para su consumo y debemos estar pendientes de las medidas de seguridad alimentaria, tanto adquiriendo alimentos que hayan superado los correspondientes controles veterinarios, como mantener las precauciones necesarias a nivel doméstico.

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