El Arc de Triomf seguirá los mismos pasos que otro monumento barcelonés de la misma época, el dedicado a Colón, y deberá someterse a una gran restauración para frenar el deterioro provocado, entre otras razones, por la mala calidad de los materiales empleados en su construcción y el paso inexorable del tiempo.
El Ayuntamiento de Barcelona acaba de sacar a concurso la redacción del proyecto ejecutivo. Sólo la elaboración de este documento requerirá un importe de casi 100.000 euros, a los que habrá que sumar lógicamente el coste de la restauración, que dadas las características del monumento se antoja elevado.
Los documentos justificativos aportados por el Ayuntamiento recuerdan que el monumento ubicado en el paseo Lluís Companys es una obra arquitectónica emblemática del arquitecto Josep Vilaseca, con esculturas de diversos autores, que fue levantada con motivo de la Exposición Internacional de 1888.
El Arc de Triomf, convertido de un tiempo a esta parte en pieza codiciada por instagramers y tiktokers, está catalogado como Bien Cultural de Interés Local (BCIL). Se trata de “una obra de gran calidad constructiva, pero que no se escapa del envejecimiento como consecuencia de las inclemencias de los factores ambientales, climatología, contaminación, deposiciones y nidos de aves, y desgraciadamente, de pequeños actos de vandálicos”.
Una peligrosa corrosión
El monumento, según el informe de los técnicos municipales, se encuentra actualmente en “un estado de conservación preocupante”, especialmente todos sus conjuntos y elementos escultóricos ejecutados con piedra artificial. Todos estos elementos están construidos con materiales de baja calidad (procedentes de Francia y Hungría) y a causa de la exposición constante a los elementos naturales y las condiciones atmosféricas adversas, han contribuido a lo largo de los años, al debilitamiento de esta materia, provocando un evidente deterioro en la piedra artificial, agravada sobre todo por la corrosión y explosión de su estructura interior de hierro.

El Arc de Triomf atrae a diario a numerosos barceloneses y turistas
Las citadas patologías “comprometen gravemente la integridad del monumento”.
El departamento de Patrimonio Arquitectónico, Histórico y Artístico del Ayuntamiento de Barcelona ha solicitado en varias ocasiones financiación para una revisión integral del monumento con el fin de evaluar la intervención necesaria para su adecuada conservación, debido a que es un gasto que la contrata de conservación y mantenimiento de los monumentos de la Ciudad no lo puede asumir. Ello ha provocado que en los últimos años sólo se hayan realizado “pequeñas intervenciones puntuales de restauración, que no han sido suficientes para evitar el estado actual de degradación”.
Mallas protectoras
Algunas partes del monumento han sido envueltas con mallas protectoras durante los últimos años con el fin de garantizar la seguridad de la ciudadanía. Estas mallas fueron retiradas durante el pasado mes de diciembre y se hizo una revisión de los diferentes elementos susceptibles de estar poco adheridos y en peligro de desprendimiento. A consecuencia de esta revisión se determinó la necesidad de intervenir de manera urgente en el monumento.

Algunos elementos de la parte superior del monumento han sido cubiertos con mallas protectoras
El pasado mes de enero se montó un andamio para iniciar los trabajos de consolidación y restauración del conjunto escultórico del escudo central del arco. Gracias a la instalación del andamio se han podido detectar también otras patologías preocupantes en el conjunto de la obra que han hecho necesaria la instalación inmediata de nuevas mallas protectoras en varias áreas para evitar cualquier tipo de desprendimiento de materiales.