La tensión vuelve a aflorar en el futuro de Talgo. Tras trascender que Sidenor había formalizado la semana pasada una oferta para adquirir el 29% de la compañía, la cuantía de la misma podría estar complicando el avance de la misma. Según fuentes consultadas, Trilantic el fondo de inversión más acuciado por salir del capital de la empresa ferroviaria no habría recibido con gran entusiasmo la cuantía ofrecida por Sidenor, 148 millones de euros según los rumores del mercado y no llegaría a los 5 euros por acción que el año pasado había puesto sobre la mesa la empresa húngara, Ganz-Mavag y que serían unos 185 millones.
Ni Sidenor, ni Talgo han querido confirmar oficialmente la cuantía de la que se está hablando. Tampoco Trilantic ha confirmado ni desmentido la información que publica el diario Expansión, sobre la ruptura de las negociaciones. Pero fuentes cercanas a la negociación han explicado a La Vanguardia que “estar en desacuerdo con el precio” no necesariamente tiene que significar “que las negociaciones se hayan roto”.
En posición de presionar
En el documento registrado en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) se asegura que “el consejo de administración de Talgo velará en todo momento por los intereses de la sociedad y sus accionistas”.
Entre esos accionistas está el fondo Trilantic, “muy interesado en salir de Talgo y en hacerlo al precio que ofrecía la empresa húngara que vetó el Gobierno”, explican fuentes del sector.
Pero no solo Trilantic presiona, también lo hacen sus socios Torreal (Familia Abelló) y la familia Oriol, con los que forman el vehículo de inversión denominado “Pegaso” que sería el que tienen que disolver para poder ejecutar la salida de Trilantic de Talgo.
Estos socios estarían en posición de presionar ya que la operación Sidenor es, en este momento, la que cuenta con más apoyos para salir adelante. Su presidente José Antonio Jainaga lleva tiempo queriendo hacer una operación de calado en la industria española y tras haber materializado su interés cuenta con el apoyo del Gobierno vasco y del español, tras vetar este último la oferta de la empresa húngara.
El Gobierno vasco ha llegado a asegurar públicamente su interés en aportar el 30% del coste de la participación de Trilantic para asegurar la operación y mantener a Talgo ligada al tejido empresarial de la comunidad foral.