Sanidad actualiza la recomendación sobre el consumo de pescado en niños
Mercurio
Según AESAN los menores de diez años no deben comer atún rojo, pez espada, tiburón y lucio
Los pescados que no debes comer cuando estás embarazada
La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) ha actualizado su guía de consumo de pescado para prevenir posibles intoxicaciones por mercurio. Los expertos recuerdan que el metilmercurio (la forma orgánica del mercurio) es un contaminante medioambiental ampliamente conocido desde hace tiempo, y que está presente en gran parte de los productos pesqueros.
Este compuesto puede ser muy peligrosos sobre todo para las mujeres embarazadas, ya que posee una alta toxicidad y se disuelve fácilmente en la grasa. Además, es capaz de atrevesar la barrera hemato-encefálica y la placenta y, como consecuencia, derivar a alteraciones en el desarrollo neuronal del feto. Las consecuencias de estas alteraciones pueden ser daños cerebrales, dificultades de aprendizaje, pérdida de audición y daños graves en el sistema nervioso del bebé.
Alerta
El metilmercurio tiene una alta toxicidad y se disuelve fácilmente en la grasa
Con el objetivo de minimizar al máximo el riesgo de exposición al mercurio, AESAN ha publicado en el año 2019 nuevas recomendaciones de consumo de pescado respecto de su contenido de mercurio.Son las siguientes:
>Para población en general: se aconseja el consumo de hasta 3 - 4 raciones de pescado por semana, procurando en todos los casos variar las especies entre pescados blancos y azules.
>Para la población vulnerable se precisa de recomendaciones más estrictas específicas para las 4 especies identificadas con un alto contenido en mercurio: Pez espada/ Emperador, Atún rojo (thunnus thynnus), Tiburón (cazón, marrajo, mielgas, pintarroja y tintorera) y Lucio.
-Mujeres embarazadas, que planeen llegar a estarlo o en período de lactancia y niños hasta 10 años, evitar el consumo de esas cuatro especies.
-Niños entre 10 y 14 años limitar el consumo de esas cuatro especies a 120 gramos al mes.
Sin embargo, AESAN también defiende que estos grupos deben seguir consumiendo una amplia variedad de pescados, por sus grandes beneficios nutritivos. Además, insisten, el pescado es una parte fundamental dentro de la dieta mediterránea.
Los pescados con un contenido bajo de mercurio son el abadejo, anchoa, boquerón, arenque, bacalao, bacaladilla, berberecho, caballa, calamar, camarón, cangrejo, cañadilla, carbonero, fogonero, carpa, chipirón, chirla, almeja, choco, sepia, jibia, cigala, coquina, dorada, espadín, gamba, jurel, langosta, langostino, lenguado europeo, limada o lenguadina, lubina, mejillón, merlán, merluza, pescadilla, navaja, ostión, palometa, platija, pota, pulpo, quisquilla, salmón, sardina, sardinela, sardinopa, solla y trucha.
La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha establecido que el consumo de alrededor desde 1-2 porciones de pescado/marisco por semana y hasta 3-4 porciones por semana durante el embarazo se ha asociado con mejores resultados funcionales del neurodesarrollo en los niños en comparación con la ausencia de consumo. Estas cantidades también se han asociado con un menor riesgo de mortalidad por enfermedad cardiaca coronaria (CHD) en adultos y son compatibles con las ingestas y las recomendaciones actuales en la mayoría de los países europeos considerados.