21 consejos que debes tener en cuenta antes de viajar al extranjero
Tips de viajes
Maleta, pasaporte, visado, vacunas, moneda, propinas, costumbres... cuestiones previas obvias y no tan obvias
Una joven consulta los horarios en una estación de tren
Las vacaciones de Navidad están a la vuelta de la esquina, un momento en el que cada vez más españoles aprovechan para hacer un viaje de invierno. Antes, sin embargo, los más afortunados tendrán en el puente de la Constitución una excusa para disfrutar de una última escapada.
Tanto si eres un viajero frecuente como ocasional -o si te estrenas con una aventura más allá de nuestras fronteras-, te ofrecemos algunos consejos que pueden facilitarte un poco las cosas. Algunos te parecerán obvios pero otros, no por evidentes, debes dejar de prestarles atención. Esperamos que te sean de utilidad. ¡Buen viaje!
1- Atención con la maleta
Se trata de un consejo básico, aunque solemos pasar de él: no viajes con exceso de equipaje. Mete en la maleta aquello que consideres necesario, pero olvídate de acarrear artículos que posiblemente ni siquiera utilizarás. Elige cuidadosamente piezas de ropa que permitan combinaciones entre sí; opta por calzado adecuado; escoge complementos para el ocio que te sean útiles y material tecnológico que no encontrarás en destino.
Una vez lo tengas claro, colócalo todo en la maleta ordenadamente e intenta que te ocupen el mínimo espacio posible. Algunos sencillos trucos te ayudarán en la tarea. Antes de salir de casa, comprueba si has identificado el equipaje bien . Si viajas en avión, podrías encontrar maletas idénticas a las tuyas en las cintas transportadoras.
Una joven intenta meter objetos 'imposibles' en la maleta
2- Cuidado con el pasaporte
Asegúrate con tiempo de que tienes la documentación en regla. Por ejemplo, que tu pasaporte tiene una validez suficiente. En muchos países exigen que su vigencia sea superior a los seis meses, algo que podría suponer un contratiempo importante a la hora de renovarlo si es un momento del año con alta demanda.
Haz una foto del pasaporte y guárdalo en tu móvil y en la nube -con contraseña, por supuesto-, de forma que, en caso de robo o pérdida, podrás acceder a él desde cualquier dispositivo. Para reforzar la seguridad, utiliza alguna bolsa pegada al cuerpo para guardarlo.
3- Verifica si necesitas visado
Aunque hayas viajado con anterioridad a tu destino, comprueba si es preciso disponer de un visado, ya que podría haber modificado su política de inmigración. Hazlo con tiempo. Mientras que en algunos países permiten solicitar la visa telemáticamente, en otros obligan a hacerlo de forma presencial en consulados o embajadas, y los trámites pueden prolongarse durante semanas.
Es importante tener en cuenta cualquier detalle. Países como China, por ejemplo, son especialmente exigentes con los requisitos de la fotografía del visado, que deben ser cumplidos escrupulosamente.
Visado y pasaporte para ir a Kathmandu, Nepal
4- Notifica al banco tu viaje
A priori podría parecer una estupidez, pero el aumento de las suplantaciones de identidad son un riesgo, por lo que no está de más, como medida preventiva, comunicar a tu banco o al emisor de tu tarjeta de crédito que piensas viajar al extranjero. Evitarás la desagradable sorpresa de ser víctima de un fraude.
Ambos también te notificarán si las operaciones tienen cargo en el extranjero. Si es así, busca fórmulas alternativas o viaja con efectivo suficiente. Si precisas cambiar moneda, infórmate de dónde será más vetajosa la operación y, en cualquier caso, evita el aeropuerto , puesto que suele aplicar tasas superiores.
En un país exótico, deberás cambiar la divisa in situ y tendrás que gastar la moneda antes de volver a cruzar la frontera, o sea que olvídate de los trámites previos (y posteriores).
5- Estrategia telefónica
Si viajas fuera de la Unión Europea infórmate de las condiciones de telefonía que ofrece tu compañía. Sobre todo, comprueba las tarifas de roaming y sigue al pie de la letra las instrucciones del operador para evitar sorpresas desagradables la recibir la factura. Si el plan no incluye los viajes extracomunitarios, considera la posibilidad de hacerte con una tarjeta SIM local que funcione con tu teléfono. En muchas ocasiones puedes adquirirla por internet con antelación.
Un turista consulta su móvil en el aeropuerto
6- Enfermedades en el extranjero
No te arriesgues a viajar si estás enfermo o si padeces alguna enfermedad que no podrá ser controlada correctamente en el exterior. En cualquier caso, infórmate previamente del sistema sanitario del destino y de dónde podrás dirigirte en caso de necesidad.
Si dispones de un seguro de salud, cerciórate de que cubra los gastos en el país y en caso afirmativo qué tipo de incidencias. Lee la letra pequeña, puedes llevarte más de un sobresalto. Y es que, en muchos países, la sanidad es cara y en otros, deficiente. Un seguro que cubra con todas las garantías, además de salvarte el viaje, puede salvar tu economía.
7- Ante alertas sanitarias...
Algunos países cuentan con políticas muy restrictivas en materia sanitaria, de forma que la sospecha de padecer alguna enfermedad, puede impedirte la entrada, sobre todo cuando existen brotes epidémicos, siempre y cuando no puedas demostrar que estás bien.
Esta situación es especialmente complicada si pretendes viajar después de haber estado en una zona con una alerta sanitaria. En este caso, prepárate para responder a un auténtico interrogatorio antes de cruzar la frontera.
8- ¿Estás vacunado?
Averigua con tiempo el riesgo de contraer enfermedades en el destino y las vacunas recomendadas. En ciertos países, para expedirte el visado de entrada, se exige un certificado internacional de vacunación.
En el portal del Ministerio de Exteriores encontrarás recomendaciones específicas por país, junto a un mapa interactivo con las vacunas y antipalúdicos necesarios. Para estar más seguro y para responder las dudas, dirígete a un centros de vacunación internacional (hay en cada provincia).
Es importante consultar las vacunas necesarias antes de un viaje
9- Identifica tus medicamentos
Viajar con determinados medicamentos requiere un cuidado adicional, ya que cada estado tiene sus límites de entrada, especialmente si se trata de narcóticos o psicotrópicos. En estos casos, viaja con el frasco original encima, acompañado de la receta, asegurándote de que ambos nombres coincidan. Algunos turistas se han visto envueltos en problemas por la posesión de fármacos considerados ilegales.
No asumas que en el extranjero encontrarás medicamentos comunes con la misma facilidad que aquí. Puede ser que sean más económicos, infinitamente más caros o que simplemente no existan. Por si acaso, prepara tu particular botiquín de primeros auxilios.
10- ¿Agua potable?
Averigua si puedes tomar agua con tranquilidad. Si no es posible, evita las bebidas con hielo, los helados, las ensaladas sin garantías de haber sido lavadas correctamente, y no te laves los dientes con agua del grifo. La experiencia nos dice que algo aparentemente tan inocente podría arruinarte las vacaciones.
En algunos destinos no es recomendable el consumo de agua corriente
11- Echa mano de las oficinas del país en el extranjero
Busca la dirección y el número de teléfono de la embajada o el consulado y prográmalo en tu móvil, para utilizarlo en caso de emergencia. Si España no dispone de oficina en el país, puedes dirigirte a la de cualquier otro estado de la Unión Europea
12- Inscríbete en el registro de viajeros de Exteriores
Antes de partir, inscríbete en el registro de viajeros del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, y en caso de una emergencia grave, como podría ser un desastre natural o un conflicto armado, podrás ser localizado rápidamente por las autoridades. Descárgate la aplicación , está disponible tanto en iOS como en Android.
13- Infórmate sobre las costumbres
Amparados en motivaciones culturales o religiosas, algún país, más allá de reprobarlas socialmente, puede llegar a castigar determinadas actitudes incluso por ley. Para evitar problemas o situaciones incómodas, haz una investigación básica. Piensa que hay países en los que no debes besarte en público , otros en los que no puedes vestir con ropa de camuflaje u otros en los que no es posible bailar o beber alcohol, o por poner sólo algunos ejemplos.
En algunos países no está bien visto besarse en público
14- Si piensas visitar mezquitas o iglesias...
Si tienes previsto visitar iglesias, mezquitas, templos u otros espacios sagrados, tenlo en cuenta. No te cuesta nada meter en la maleta un chal, una bufanda o un pareo para cubrir los hombros, y no usar pantalones cortos o minifalda. De lo contrario, te pueden vetar el acceso.
15- Utiliza millas aéreas
Si realizas un viaje de larga distancia y no eres miembro de ningún programa de viajeros frecuentes, considera la posibilidad de unirte a alguno de ellos. Ganar millas te permitirá obtener beneficios, como precios más baratos en hoteles o aerolíneas y servicios premium.
En ocasiones estos programas -al igual que determinadas tarjetas de crédito- dan derecho a utilizar salas vip de aeropuerto, espacios con servicios exclusivos de pago o gratuitos, según el caso.
Una mujer descansa en la sala vip de un aeropuerto
16- Atención a la política de equipaje
Toma en consideración las limitaciones de peso de cada aerolínea y cada tramo de viaje. Ten en cuenta que las políticas de equipaje de las compañías aéreas cada vez son más restrictivas por lo que respecta a tamaño y peso de las maletas. Esta tendencia no sólo afecta a las low cost, sino también a aerolíneas regulares. Si tu equipaje sobrepasa las medidas establecidas el coste económico puede ser considerable.
17- Cuidado: lo barato puede salir caro
Antes de contratar un vuelo o reservar un hotel, no te dejes llevar exclusivamente por el precio. Valora las consecuencias de tus decisiones. A veces, lo barato sale caro . Un billete económico a horas intempestivas podría obligarte a tomar un taxi por falta de transporte público; a pagar más de los que tenías previsto en equipaje, o a un desembolso adicional en comida a bordo. Lo mismo puede pasarte con un hotel alejado del centro o con el alquiler de un vehículo.
En un vuelo de largo recorrido tal vez sea preferible pagar algo más y viajar cómodamente en una butaca con más espacio para las piernas o con un servicio cuidado.
Un joven llega al aeropuerto antes de amanecer
18- Consulta las previsiones meteorológicas
No es una cuestión menor: el día anterior al viaje, verifica las previsiones meteorológicas. No te fíes exclusivamente de los datos históricos. El tiempo podría cambiar a última hora y obligarte a deshacer y rehacer de nuevo la maleta. ¡Sé previsor!
19- Opta por un alojamiento familiar
Cuando viajas en familia, no hay nada mejor que regresar a última hora, tras un agotador día recorriendo la ciudad, y tener un especio propio en el que relajarse y cocinar a tu gusto. En este caso, valora el alquiler vacacional o el hostel -mucho más flexible- en lugar de un hotel. Olvídate de prejuicios, los hay de todo tipo y para todos los gustos.
La elección del alojamiento tras una larga jornada es fundamental
20- ¿Alquilar un coche?
Si pretendes alquilar un coche, antes que nada, comprueba cuáles son los requisitos para hacerlo. En algunos países es preciso disponer del carnet de conducir internacional, un documento expedido por la Dirección General de Tráfico. El trámite para obtenerlo es presencial y rápido, pero requiere cita previa, algo que en las semanas previas a las vacaciones, lo complica.
Una observación más: no sólo en Gran Bretaña se circula por la izquierda . Alrededor de 70 países de todo el mundo conducen por el lado opuesto. Se trata fundamentalmente de antiguas colonias del imperio británico o de estados próximos, sobre todo asiáticos, y de algunos del Viejo Continente. Debes tenerlo en cuenta a la hora de tomar la decisión.
21- Y finalmente...las propinas
A la hora de cerrar un presupuesto es importante tener en cuenta el papel de las propinas. La pregunta es ¿debemos darlas a camareros, taxistas, guías, porteros o botones? y ¿qué cantidad es la adecuada? Lo cierto es que depende de cada país. El muchos, los profesionales no esperan nada de los turistas porque viven de sus salarios, pero en algunos rincones del mundo, la propina es en realidad la retribución principal. Lo más prudente es informarte antes de partir.