¿Qué beneficios tiene catalogar a un vehículo como histórico?

Actualmente, todo vehículo con una antigüedad mínima de 30 años desde su fabricación o desde la fecha de su primera matriculación puede ser catalogado como vehículo histórico. Hasta 2018 era obligatorio que hubieran transcurrido al menos 25 años desde su fabricación o matriculación, pero cuando entró en vigor el Real Decreto 920/2017, de 23 de octubre, la cifra se amplió hasta las tres décadas. Así pues, quien tuviera previsto solicitar en junio la calificación de histórico para un automóvil de, por ejemplo, 1993, deberá esperar un lustro para poder hacerlo.

También pueden recibir esta consideración los vehículos incluidos en el Inventario General de Bienes Muebles del Patrimonio Histórico Español o aquellos que hayan sido declarados de interés cultural. Asimismo, se podrán considerar históricos los que tengan algún tipo de interés especial, ya sea por haber pertenecido a una personalidad relevante o participado en algún acontecimiento histórico.

Los vehículos de colección pueden llegar a recibir esta catalogación si por sus características, singularidad, escasez manifiesta u otra circunstancia especial muy sobresaliente, merecen acogerse al régimen de los vehículos históricos.

El dato

Los vehículos históricos tendrán descuentos en el seguro y no estarán obligados a cumplir las nuevas legislaciones anticontaminación

Cabe señalar que tener la edad requerida no es el único requisito necesario para poder recibir la catalogación de vehículo histórico. La unidad en cuestión debe cumplir otras premisas. Debe estar en su estado original y no haber sido sometido a ningún cambio fundamental en cuanto a sus características técnicas o componentes principales (motor, frenos, dirección, suspensión o carrocería).

En todo caso, las piezas que monta deberán haber sido fabricadas en el período de fabricación normal del tipo o variante de que se trate y de sus recambios, con excepción de los elementos fungibles sustituidos por reproducciones o equivalencias efectuadas con posterioridad al período de producción normal.

Según explica Tramicar, la primera plataforma online en la gestión de compraventa de vehículos de segunda mano, esta catalogación conlleva una serie de beneficios económicos con respecto a una matrícula ordinaria. Estas ventajas se fundamentan, en primer lugar, en la exención del pago del Impuesto de Circulación; ya que son muchos los municipios en los que no se tendrá que pagar este impuesto, mientras que en otros se obtendrá una disminución del 50% de este gravamen.

Asimismo, las inspecciones obligatorias de la ITV serán más duraderas y habitualmente más permisivas, pudiendo extenderse desde dos hasta cinco años en función de las características que posea el automóvil. Asimismo, los vehículos históricos tendrán descuentos en el seguro y no estarán obligados a cumplir las nuevas legislaciones anticontaminación (control de emisiones de CO2, nivel de ruidos, etc).

Desde Tramicar explican los pasos a seguir para llevar a cabo la tramitación para catalogar a un vehículo como histórico.

1. Lo primero que tendrá que hacer el propietario es verificar que su vehículo cuenta con todas las características necesarias para la catalogación. Por eso deberá acudir a un laboratorio oficial para la catalogación de vehículos históricos, que llevará a cabo una inspección para verificarlo. Se entregará un informe y una ficha técnica reducida al interesado, donde se establecerá el periodo para pasar la ITV, así como otras consideraciones como la velocidad máxima a la que se debe circular, prohibición de circular por la noche, etc.

El dato

El coste total de este trámite será de unos 600 euros aproximadamente

2. A continuación, un club de automóviles clásicos reconocido o el propio fabricante del coche deberá certificar el interés del vehículo como histórico.

3. Después, se deberá presentar la solicitud en la Consejería de Industria de la comunidad del interesado, para que lleve a cabo esta misma consideración.

4. Una vez aprobada, se tendrá que acudir a una ITV con el objetivo de que verifiquen que el vehículo cumple con todos los detalles confirmados por el informe y elaboren una nueva tarjeta de inspección técnica donde se recojan las nuevas especificaciones de la nueva condición del vehículo.

5. Por último, se pedirá el cambio de matriculación en la Jefatura Provincial de Tráfico, para emitir la nueva documentación histórica del vehículo. Además, para este último trámite será necesario presentar el DNI, tarjeta de residencia o pasaporte, la documentación que acredite la propiedad del vehículo, el justificante del pago o exención del impuesto de circulación e impuesto de transmisiones patrimoniales y si el coche procede de fuera de la Unión Europea el Documento Único Administrativo (DUA) expedido por la Aduana; así como cuatro fotos a color del vehículo laterales, traseras y delanteras y permiso de circulación y tarjeta ITV (original y fotocopia) en vigor en el caso de que el vehículo estuviese en circulación.

En conclusión, los trámites que hay que llevar a cabo para clasificar a un vehículo como histórico son algo tediosos, y tendrán un coste total de unos 600 euros aproximadamente.

“Las compañías de seguros y las Administraciones pueden aplicar limitaciones de uso y circulación con cuestiones relativas al número de kilómetros recorridos al año, restricciones en la circulación nocturna o en condiciones climáticas adversas con visibilidad reducida; y el Estado podrá apelar a los nuevos derechos sobre el vehículo, como solicitarlo para alguna exposición. No obstante, al propietario del vehículo podrá interesarle tener uno por todos los beneficios que trae consigo”, subraya Jorge Alcántara.