Mike Johnson revalida la presidencia de la Cámara de Representantes en una tensa votación
Estados Unidos
El ‘speaker’ solo tuvo que pasar una votación, pero estuvo parada un buen rato para aplacar a los disidentes
Mike Johnson comparece ante la prensa el pasado 19 de diciembre
Lo que se consideraba un trámite en la historia del Congreso de Estados Unidos, algo que solo sucedía una vez en un siglo, se ha convertido en una rutina y en un suplició para el aspirante.
Mike Johnson mantendrá la presidencia de la Cámara Baja de Estados Unidos, pero lo hará después de sufrir un largo rato de negociaciones ante la actitud rebelde de un puñado de legisladores republicanos, del mismo partido de Johnson. Los rebeldes no siguieron la recomendación de su líder, Donald Trump, que dio pleno apoyo al que fue el speaker la legislatura previa.
Los rebeldes no siguieron la recomendación de su líder, Donald Trump
Hubo una sola votación, si bien estuvo interrumpida mientras se realizaban negociaciones de urgencia. Por fin, los dos últimos resistentes –Ralph Norman y Keith Selft– decidieron votar por el representante oficial de los conservadores.
Johnson –218 apoyos, por 215 del demócrata Hakeem Jeffries– retuvo la posesión del mazo de mando que consiguió la pasada legislatura, tras otra rebelión republicana. En aquella ocasión, el gran derrotado fue Kevin McCarthy.
Hubo un verdadero juego de teléfonos, dentro y fuera del hemiciclo. No estaba claro que se les ha prometido a Norman y Selft, pero Johnson sostuvo que no estaba dispuesto a hacer pactos con nadie. “No hay quid pro quo, no voy a hacer nada a cambio de un voto salvo hacer que la institución trabaje de las forma más efectiva y eficiente”, dijo.
Al final, solo un republicano, el representante por Kentucky Thomas Massie, se opuso a la reelección de su correligionario. A pesar de salvar el cargo a la primera, lo que transmitió esa tensa votación no fue otra cosa que la profunda división entre los rangos conservadores.