Los amargos 60 años de Isabel Pantoja

Isabel Pantoja llega a una edad redonda en el momento menos redondo de su existencia. La tonadillera estrena los 60 años tan recluida en Cantora como lo estuvo durante un año y medio en la prisión femenina de Alcalá de Guadaíra. Aunque se preveía que la libertad condicional de la que disfruta desde el 24 de marzo supondría su vuelta a los escenarios, más o menos inmediata, cinco meses después no canta ni por los pasillos del cortijo. Pantoja está mustia. Motivos tiene. Su hija Chabelita, alejada a años luz del clan familiar, concede exclusivas para explicar que continúa sintiéndose miembro de segunda clase; su exconfidente Dulce, con quien no se habla desde que Chabelita huyó de Cantora, revela que incluso Julián Muñoz también la habría traicionado años ha, al interesarse por sus encantos; el dinero no fluye y, con la casa en que vive embargada, no tiene propiedades que vender; finalmente, el amor que terminó al comenzar el proceso del caso Malaya, no ha vuelto a llamar a su puerta. Sola, sin poder fiarse al cien por cien de quienes la rodean, Pantoja no tiene ánimo ni para soplar las velas.

Hasta los 10 años: ha nacido una futura estrella

Isabel Pantoja nace el 2 de agosto de 1956 en el barrio de Triana. Es hija de artistas: su padre, Juan Pantoja, del trío Los gaditanos, es guitarrista flamenco; su madre, Ana Martín, ha sido bailaora con Pepe Pinto y Juanita Reina. Incluso su abuelo Antonio Pantoja, conocido como Pipoño de Jerez, fue cantaor. La niña comienza a cantar y tocar las palmas con siete años.

De los 10 a los 20: El corral de la morería

En 1969, con su padre enfermo de hepatitis y los recursos económicos muy menguados, la familia (son cuatro hermanos) considera que a la niña le hará bien una temporada con su abuelo en Mallorca. Allí, Antonio Pantoja media para que actúe con su primo Antonio Cortés ‘Chiquetete’, con quien hoy no mantiene relación alguna. Maribel se suma a su cuadro artístico y debuta profesionalmente en la sala de fiestas El rombo. A su regreso a Sevilla, ficha por el tablao El embrujo, de Baldomero Negrón. Aunque en un principio bailaba y tocaba las palmas para Chiquetete, Negrón le pide que cante versiones de Marifé de Triana y Juanita Reina. Fue allí donde la vieron actuar el músico Juan Solano y el letrista Rafael de León, que con Antonio Quintero y Manuel Quiroga, compuso la mayor parte de coplas que el lector conoce.

Con 17 años, se marcha con su madre a Madrid para instalarse en una pensión y recibir clases del maestro Solano. Su padre sube también a Madrid y consigue trabajo como guitarrista en El corral de la morería, tablao fundado el mismo año en que nació Isabel, por el que han pasado los más grandes del flamenco y aún en funcionamiento. Juan Pantoja logra que Manolo del Rey, el dueño, contrate a su hija para el cuadro de baile. Cobra 500 pesetas diarias y se llama simplemente Maribel hasta que Del Rey la oye cantar y le sube la cifra a 1.500. Incluso el maestro Solano se deslumbra al verla en directo y se dedicará por entero a ella. Con 18 años Isabel da un nuevo salto: debuta en el Teatro Calderón y publica su primer disco.

De los 20 a los 30: el éxito y Paquirri

Este período fue especialmente intenso: se consagró como artista, se casó, tuvo un hijo y se quedó viuda. Sus tres primeros álbumes (Tablao Triana, Fue por tu voz y Que dile y dile) no tuvieron demasiado éxito. Este llegaría en 1976 con Niña Isabela, refrendado por 22 abriles tengo (1979), Al alimón y Amante (1981) y el de sevillanas titulado ¡Viva Triana! (1982). En 1983 se consagra como una artista de primera fila con Cambiar por ti, más cerca del pop que de la tonadilla y que fue disco de oro al rebasar las 50.000 copias vendidas. Isabel Pantoja tiene 27 años, diez discos y, en la cresta de la ola, conoce a Francisco Rivera ‘Paquirri’. Isabel se encontraba en la feria de Jerez y en el vestíbulo del hotel donde se hospedaba, un reportero la invitó a subir a felicitar al torero tras una memorable faena. “¿Así que tú eres la Pantoja?”, cuenta ella que le preguntó el torero. “Me llamo Isabel”, respondió ella. Esas fueron las primeras palabras que cruzaron. Él ya estaba separado de Carmen Ordóñez y se veía entonces con Lolita, a quien dejó por Isabel. Se casaron el 30 de abril de 1983 en la basílica sevillana del Gran Poder. En febrero del año siguiente nace su único hijo, Kiko Rivera. Paquirri fue fatalmente cogido en Pozoblanco un 26 de septiembre de 1984 e Isabel se convertía en la ‘viuda de España’.

De los 30 a los 40: el luto y Encarna Sánchez

Isabel tiene aún 29 años cuando, tras uno entero de luto sin pisar los escenarios, publica Marinero de luces (1985), casi de inmediato disco de platino y su trabajo más vendido. Isabel vuelve a cantar tras la muerte de Paquirri por primera vez en el teatro Lope de Vega de Madrid, en una gala a beneficio de la Fundación Reina Sofía. Es diciembre de 1985 y los reyes la recibirán en audiencia privada. En la segunda mitad de la década llegarán Tú serás mi Navidad, Desde Andalucía, Se me enamora el alma y La canción española, BSO de Yo soy esa, su primera película. En 1990, tras ver los espectadores cierta química entre ella y el actor Jose Coronado, se especula con un idilio entre ambos. El año siguiente, estrena su segundo filme, El día que nací yo. En esos años, Isabel y la locutora Encarna Sánchez establecen una relación de amistad muy íntima; tanta era la comidilla nacional que el dúo cómico Martes y 13 la retrata en uno de sus más memorables sketches de Fin de Año, para infinito enfado de Sánchez.

De los 40 a los 50: María del Monte y Chabelita

En 1996, Isabel mantiene una muy estrecha amistad con la también cantante María del Monte –hoy no existe ni el cariño del recuerdo entre ambas– y ha dejado de frecuentar a la locutora de la COPE. La tonadillera decide adoptar a una niña en Perú. Una rápida consulta a la hemeroteca nos permite recordar que la adopción fue controvertida: en mayo de 2002, el extinto diario peruano Hoy publicaba que Vladimiro Montesinos, mano derecha del presidente Fujimori y en una cárcel militar, habría acelerado considerablemente los trámites de adopción de Chabelita. Según el diario, Montesinos y la exfiscal Blanca Nélida Colán se habrían embolsado 80.000 dólares por agilizar el papeleo. Isabel Pantoja negó siempre cualquier pago irregular, Chabelita llegó a España en mayo de 1996 y María del Monte fue su madrina.

Tras alejarse de la cantante de sevillanas, a finales de 1999 Isabel inicia una relación con el exjugador de baloncesto y directivo de casinos Diego Gómez que durará cuatro años. Con su apoyo abrió el restaurante Cantora, que resultó un fiasco. La pareja rompió en marzo de 2003 y poco después comenzó a frecuentar la amistad de Julián Muñoz, entonces alcalde de Marbella, que la había contratado el año anterior como imagen de la ciudad. Será en la romería del Rocío de 2004 cuando la tonadillera y Julián Muñoz (casado aún con Mayte Zaldívar), hagan público que están juntos. Muñoz ha perdido ya la alcaldía por una moción de censura pero sigue siendo un hombre poderoso.

De los 50 a los 60: Julián Muñoz y la cárcel

Esta década, salvando el lógico dolor por la muerte de Paquirri, ha sido su época más difícil. En 2006 Isabel Pantoja ve cómo su novio entra en la cárcel, acusado de malversación de caudales y cohecho. En ese momento nadie barrunta que la Operación Malaya acabaría salpicándola a ella con la pieza separada del caso Blanqueo. Pantoja apoya sin fisuras a su amado; se refiere a él en sus conciertos y acude a verlo a al prisión de Alhaurín. En noviembre de ese año es detenida Mayte Zaldívar; según la instrucción judicial, Muñoz seguía pasándole nutridas cantidades de dinero a través de un banco suizo. Pantoja comienza entonces a alejarse públicamente de él: “Julián me había dicho que no tenía dinero. He trabajado para mantenerle y desconocía las cuentas en el extranjero. Me considero una víctima”, explica en un comunicado.

El 2 de mayo de 2007 Pantoja es detenida acusada de delitos contra la Hacienda Pública y blanqueo de capitales. Queda en libertad bajo fianza. Su hijo Kiko rompe en julio de 2007 con Tamara, una novia del gusto de la tonadillera. Desde ella y hasta encontrar a Irene Rosales, su prometida, todo serán errores. En febrero de 2009, la tonadillera confirma su esperada ruptura con Julián Muñoz y hasta que resulte procesada, puede disfrutar de relativa paz. Sin embargo, en abril de 2013 la se pone realmente fea: Isabel, imputada en el caso Blanqueo, es condenada en abril de 2013 a 24 meses de prisión y una multa de 1.147.000 euros. El mes siguiente, Kiko rompe con Jessica Bueno y sabe desde ese momento que su primer nieto, Francisco Rivera IV, será más difícil de ver. En noviembre de ese año se hace público que Chabelita está embarazada, coincidiendo con su mayoría de edad. El disgusto de la tonadillera fue pasto de tertulianos y analistas de lo evidente. En septiembre de 2014 busca desesperadamente dinero para hacer frente a una colosal deuda con Hacienda: 1,8 millones, que se suman al millón y pico de la multa penal. Finalmente, el 21 de noviembre de 2014 ingresa en la cárcel.

Isabel salió de prisión este 2 de marzo sin dinero, sin pasaporte, con menos amigos y una hija díscola que no deja de darle quebraderos de cabeza. Con todo y con eso, le deseamos feliz cumpleaños.