Visión Líder
Banco de conocimiento
En colaboración con Banco Sabadell
Liderarse a uno mismo
Del autoliderazgo consciente al liderazgo sostenible
Antes de liderar a otros, un líder debe conocerse y autogestionarse, ya que el compromiso con su equilibrio emocional, físico y mental es esencial para ejercer un liderazgo auténtico, sostenible e inspirador
Un líder sostenible es aquel que sabe parar y reflexionar, con el fin de dejar su mejor huella y aportar lo mejor de sí mismo a los demás, contribuyendo desde el ejemplo a crear un mundo mejor.
La empresa más importante que lideramos es nuestra vida, y el equipo al que servimos incluye a quienes nos rodean: familia, amigos, compañeros… Todos somos líderes porque liderar es influir, y todos influimos en los demás. Sin embargo, ¿puede esta influencia ser verdaderamente positiva si uno se olvida de sí mismo? Aquello que llevamos dentro inevitablemente se refleja en el exterior. No se puede ofrecer lo que no se posee, o quizás sea posible por un breve período; pero ¿sería auténtico y sostenible a largo plazo? Para reflexionar sobre el autoliderazgo, Esther Bauset, mentora y coach ejecutivo, creadora del Método Bauset y autora del libro Tu vida, tu mejor empresa. Conviértete en director general de ti mismo, invita a preguntarse si “es posible ser un buen líder sin haber aprendido antes a liderarse, si realmente se está satisfecho con los resultados obtenidos en las distintas áreas de la vida y si se vive plenamente o simplemente se sobrevive”.
Cuando uno es su peor jefe, los niveles de autoexigencia se disparan y nada parece suficiente ni suficientemente bien hecho. Se busca tenerlo todo bajo control y, cuando las cosas no salen como se esperaba, surge la culpa o se proyecta hacia los demás. Esa sensación constante de preocupación y desasosiego paraliza, haciendo que se viva desde el miedo. “El miedo te hace perder el equilibrio —explica Bauset— y te empuja hacia los extremos. Comienzas a imaginar los peores escenarios y, sin darte cuenta, terminas creándolos. Cuanto más control intentas ejercer, más miedo sientes; y a mayor control, menos confianza, tanto en el éxito de tu empresa como en las relaciones con quienes tienes cerca”.
Una de las claves del liderazgo sostenible es dedicar tiempo a reuniones con uno mismo: momentos de alto impacto que permiten reforzar el autoconocimiento y tomar decisiones estratégicas para un futuro más eficiente y productivo
En cambio, cuando se es el mejor líder de uno mismo, se conocen a fondo las propias fortalezas y áreas de mejora, identificando los valores que sustentan cada decisión y ayudan a encontrar el equilibrio. Se aprende de los errores, se agradecen y celebran los éxitos, y el nivel de autoconocimiento crece con cada experiencia, impulsando una mejora continua en la búsqueda de la excelencia. Así, “ser el mejor líder significa convertirse en el director general de uno mismo, eligiendo vivir desde el amor en lugar del miedo, una elección que conduce a la calma, al equilibrio y al crecimiento”.
El autoliderazgo consciente comienza ofreciéndose amor a uno mismo. “Amarse, confiar en uno mismo, en los demás y en la vida es la base para autoliderarse de forma consciente”, señala Bauset. Es importante ser consciente de que la vida es un regalo por tiempo limitado, y que cada persona es responsable de disfrutarlo plenamente. Esta claridad mental permite interpretar las emociones ante cualquier dificultad, encontrando las mejores soluciones que impacten de forma positiva en el ámbito personal y profesional.
Cuando uno toma conciencia y aprende a liderar su vida, se convierte en el mejor líder de sus equipos, inspirando confianza, dejando su mejor huella y siendo un ejemplo en la familia y en el trabajo
Una de las herramientas clave de los líderes sostenibles son las reuniones con uno mismo. No se trata de encuentros de pasillo, sino de “momentos de alto impacto que refuerzan el autoconocimiento, activan la confianza y permiten al líder tomar decisiones para crear su mejor futuro y alcanzar los mejores resultados”.
Por tanto, un líder sostenible es quien honra su pasado, cultiva su presente y diseña su futuro. Al poner sus dones al servicio de los demás, se compromete con su equilibrio emocional, físico y mental. Este tipo de líder sabe que su misión es crear la mejor historia de su vida, dejar una huella significativa y contribuir a un mundo mejor. Como afirma Esther Bauset, “el liderazgo y la sostenibilidad comienzan en uno mismo, cuando se toma conciencia del legado que decides dejar con tu vida”.