Encontrarás acelgas todo el año, pero el mejor momento para consumirlas es en otoño y en invierno.
Hervirlas en exceso no es la mejor forma de cocinarlas, ya que les resta sabor y nutrientes, así que cocínalas en poca agua con una pizca de sal y hazlo solo el tiempo justo.
Pencas acelga rellenas y con bechamel
Ingredientes
8 hojas grandes de acelga
2 pimientos verdes
3 lonchas de queso semicurado
3 lonchas de jamón serrano
Harina
1 huevo
Aceite de oliva virgen extra
Salsa bechamel
Sal
Elaboración
1. Separa las hojas de las pencas de las acelgas. Limpia bien las hojas y resérvalas.
2. Retira los hilos de las pencas, córtalas en unos trozos de unos 7 centímetros y cuécelos en una cazuela con agua y sal durante 10 minutos. Escurre y reserva.
3. Corta las lonchas de jamón y queso del tamaño de los trozos de las pencas y reserva.
4. Corta los pimientos verdes en trozos del mismo tamaño y fríelos a fuego suave en una sartén con aceite. Escúrrelos sobre papel absorbente de cocina. Sazona con sal.
5. Extiende la mitad de las pencas sobre una fuente. Pon encima de cada una un trozo de jamón, uno de pimiento y uno de queso. Tápalas con el resto de las pencas.
6. Pásalas por harina y luego por huevo batido, y fríelas en una sartén con aceite por los dos lados. Escúrrelas sobre un plato con papel de cocina.
7. Sirve con un poco de salsa bechamel.
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