Contaba ayer en La Vanguardia la periodista Sílvia Oller que los Ayuntamientos de Ripoll y de Campdevànol han recomendado a sus vecinos abstenerse de consumir agua del grifo "de forma continuada para beber o cocinar" por los altos niveles de arsénico detectados en estas dos zonas de Catalunya.
Si la Organización Mundial de la Salud (OMS) establece el límite recomendado de arsénico en el agua potable en 10 µg/L; en estos dos municipios sobrepasa los 10 microgramos por litro (10 µg/L), lo que nos lleva a plantearnos dos preguntas: ¿qué riesgos tiene para la salud? y ¿existe alguna forma de eliminar en casa el arsénico del agua para evitar que sea tóxico?
1. Los riesgos para la salud
El arsénico, según explica la OMS en un informe, es un elemento natural de la corteza terrestre que está presente a niveles altos en las aguas subterráneas de muchos países. Es un elemento muy tóxico en su forma inorgánica y su mayor amenaza para la salud pública reside en la utilización de agua contaminada para beber, preparar alimentos y regar cultivos alimentarios (por eso está también muy presente en el arroz, como seguramente ya has escuchado).
La exposición prolongada al arsénico a través del consumo de agua y alimentos contaminados puede causar diferentes tipos de cáncer y lesiones cutáneas, además de asociarse a enfermedades cardiovasculares y diabetes en algunos de los estudios presentados durante los últimos años.
La exposición prolongada al arsénico a través del consumo de agua tiene consecuencias para la salud j
La OMS también explica que los primeros síntomas de la exposición prolongada a altos niveles de arsénico inorgánico se observan generalmente en la piel, que cambia de pigmentación, apareciendo lesiones cutáneas y durezas y callosidades en las palmas de las manos y las plantas de los pies. Estos efectos se producen tras una exposición mínima de aproximadamente cinco años y pueden ser precursores de cáncer de piel.
Además, el consumo de arsénico también se asocia a desenlaces adversos del embarazo y mortalidad infantil, enfermedades pulmonares, infartos de miocardio e insuficiencia renal; y en numerosos estudios se han demostrado los efectos negativos de la exposición al arsénico en el desarrollo cognitivo, la inteligencia y la memoria.
2. ¿Puedo eliminar el arsénico del agua yo solo en casa?
Según asegura la OMS, lo más útil y recomendable para prevenir la toxicidad del arsénico es la implantación de un sistema inocuo de abastecimiento de agua potable en la comunidad afectada; pero a causa de la sequía que nos acecha en las zonas de Catalunya previamente citadas la medida no es suficiente, lo que ha llevado a las autoridades a recomendar no beber agua del grifo en casa.
Filtro de agua para la cocina
Sí existen para el hogar algunos sistemas de eliminación del arsénico, aunque todavía no se sabe si realmente son eficaces. Entre las tecnologías destacan la oxidación, la coagulación-precipitación, la absorción, el intercambio de iones y diversas técnicas de membranas.
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Basta con hacer una rápida búsqueda en Google para ver que hay un número creciente de opciones eficaces y baratas para eliminar el arsénico de los suministros pequeños y domésticos en el mercado, aunque según explica la OMS faltan pruebas de la eficacia de esos sistemas a largo plazo.