Hoy en día, los abuelos ejercen un papel de suma importancia en el cuidado de los nietos. Son un pilar fundamental para propiciar una adecuada conciliación laboral y familiar a los padres. Pero, más allá de abuelos que se quedan con los niños durante algunas horas al día, también hay casos en que directamente sus nietos viven con ellos.
Por diversas razones, los nietos se instalan de forma indefinida en la casa de sus abuelos. Esta convivencia eleva la carga y responsabilidad, pues ya no tienen que cuidar o vigilar a los niños de forma periódica, sino que pasan a ser los encargados de su crianza y educación a tiempo completo.
Para que esta situación sea exitosa, es imprescindible saber poner límites a los niños, a fin de que no se conviertan en unos caprichosos. También hay que tomarlo con calma, pues la energía y capacidad física de los abuelos no es la misma que cuando ellos fueron padres.
Consejos para abuelos que viven con sus nietos
La Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) elaboró un decálogo del “abuelo canguro” donde citan consejos prácticos a fin de facilitar el cuidado de los abuelos a los nietos. Si bien este se enfoca en cuidados puntuales, muchos puntos pueden extrapolarse a la convivencia entre niños y mayores de forma estable.
La primera recomendación de la SEGG es hacer lo que puedas y no sobrecargarte de labores. Relacionada con esta máxima, es importante no descuidar tu propia salud. La edad pasa factura y es importante conocer los límites de las capacidades, tanto físicas como cognitivas. Mantenerse en buena forma es clave, haciendo ejercicio, siguiendo una dieta saludable y estimulando tu mente.
Establecer una buena comunicación con los padres de los niños resulta fundamental, pero también lo es hacerlo con los propios niños. Es conveniente encontrar un punto intermedio entre imponer y “ser un ogro” y ser demasiado permisivos y consentirles en exceso, pues así solo conseguiremos malcriar a nuestros nietos. Poner límites y establecer unas normas es necesario.
La SEGG también aconseja reservarte tu propio tiempo y espacio, practicando actividades que te gusten y reservándote momentos de ocio gratificantes. Para poder cuidar de tus nietos, has de sentirte bien. De hecho, es importante disfrutar de los nietos y del tiempo compartido con ellos. Se trata de una excelente oportunidad para estrechar vuestros vínculos, sentirte activo y, además, combatir la soledad no deseada tan extendida en la tercera edad.
Otro punto al que hace referencia la SEGG es no sentirte culpable si no puedes realizar determinadas tareas como antes. Asimismo, apelan a realizar actividades con los nietos que se adecúen a ti y sean gratificantes para todos. Además de tareas rutinarias como llevarlos al colegio, bañarlos, hacer los deberes… También hay que encontrar momentos de diversión como jugar a un juego de mesa o acudir juntos al parque.