La alergia al polvo es, sobre todo, alergia a las partículas y heces que desprenden los ácaros del polvo, unos insectos que viven en las zonas más cálida, húmedas y con mayor acumulación de polvo que hay en el hogar como la ropa de cama, las alfombras, los colchones o los muebles. Los ácaros del polvo se alimentan de las escamas de la piel de personas de animales, restos de insectos y hongos. Se calcula que la alergia al polvo afecta al menos al 25 por ciento de la población y los primeros síntomas se suelen experimentar durante la niñez.
Causas de la alergia al polvo
Sustancias que desprenden los ácaros del polvo
Los ácaros son unos insectos microscópicos de la familia de las arañas y las garrapatas y suelen ser causa de rinitis alérgica, asma, conjuntivitis y dermatitis atópica . Hay muchas especies pero los de mayor interés son:
- Dermatophagoides pteronyssinus. Prefiere climas húmedos y templados aunque se encuentra en todo el mundo y es el ácaro dominante en domicilios. La hembra vive unos 70 días y puede llegar a poner unos 120 huevos.
Dermatophagoides farinae. Es frecuente en áreas continentales y áridas. La hembra vive unos 70 días y pone unos 80 huevos.
- Blomia tropicalis. Se alimentan de las células epiteliales humanas y prefieren áreas de temperaturas en torno a los 25ºC y humedad del 75 por ciento. El otoño es una época de concentración de este ácaro. La hembra vive unos 58 días y pone unos 28 huevos.
- Dermatophagoides microceras. Similar al Dermatophagoides farinae. Está presente en el polvo doméstico y la hembra vive unos 100 días llegando a poner unos 61 huevos.
- Euroglyphus maynei. Es una de las especies más abundante y es muy común en España y, sobre todo, de distribución cosmopolita. La hembra llega a poner unos 84 huevos.
- Acarus siro. Muy frecuente en productos almacenados como harina, cereales, legumbres, semillas… Es resistente a las bajas temperaturas. La hembra puede llegar a poner unos 300 huevos.
- Glycyphagus domesticus. Está en alimentos y granos y en el polvo doméstico. Vive a temperaturas entre los 10ºC y los 15ºC con humedad por encima del 87 por ciento.
- Lepidoglyphus destructor. Frecuente en climas templados y se localiza en productos almacenados y en el polvo doméstico. La hembra vive unos 25 días y llega a poner unos 130 huevos.
- Tyrophagus putrescentiae. Frecuente en productos almacenados y en cocinas y baños. Es cosmopolita. La hembra vive unos 20 días y puede llegar a poner unos 380 huevos.
La causa de la alergia al polvo es la reacción del sistema inmune que genera anticuerpos frente los alérgenos (sustancias extrañas) lo que provoca una respuesta inflamatoria en las fosas nasales y los pulmones que puede acabar derivando en asma.
Son factores de riesgo para desarrollar alergia al polvo:
- Tener antecedentes familiares.
- Exposición habitual a los ácaros del polvo.
Síntomas de la alergia al polvo
Ojos rojos y estornudos
Los síntomas más frecuentes de la alergia a los ácaros del polvo son:
- Estornudos.
- Moqueo y goteo nasal.
- Ojos rojos y llorosos o con picazón.
- Congestión nasal.
- Picazón en la nariz, los ojos, el paladar o la garganta.
- Tos.
- Piel azulada e inflamada bajo los ojos.
Diagnóstico de la alergia al polvo
Varias pruebas
El alergólogo realizará pruebas cutáneas introduciendo pequeñas cantidades de extractos de alérgenos para observar la reacción en la piel que ante la sensibilidad frente a un alérgeno se inflama, enrojece y pica. También se pueden realizar análisis de sangre en busca de anticuerpos específicos
Tratamiento y medicación de la alergia al polvo
Varias opciones
La primera medida del tratamiento a la alergia al polvo o a los ácaros del polvo es tratar de eliminar los ácaros en el hogar. Aparte, se pueden recetar medicamentos como los antihistamínicos tanto vía oral, como la fexofenadina o la loratadina, como en forma de aerosol nasal como la azelastina o la olopatadina.
Los corticoesteroides pueden reducir la inflamación y los descongestionantes facilitar la respiración por la nariz al reducir la inflamación en las fosas nasales. Estos últimos no se pueden recetar en caso de hipertensión arterial o agrandamiento de próstata por lo que se suele recomendar la irrigación nasal con agua salada para expulsar la mucosidad.
Otro abordaje es la inmunoterapia que consiste en un “entrenamiento” del sistema inmunitario para insensibilizarlo al alérgeno. Se realiza mediante una serie de vacunas que exponen al paciente a dosis muy pequeñas del alérgeno una o dos veces por semana durante un máximo de seis meses. Se tiene que mantener el tratamiento de tres a cinco años.
Prevención de la alergia al polvo
Eliminar los ácaros en el hogar
Las medidas de prevención frente a la alergia al polvo se basan, sobre todo, en eliminar los ácaros del polvo en el hogar:
- Lavando la ropa de cama cada semana a una temperatura de 60ºC y secarla por completo a buena temperatura.
- Manteniendo el nivel de humedad en la vivienda por debajo del 50 por ciento.
- Evitar utilizar en la decoración y los textiles del hogar materiales que cojan polvo con facilidad.
- Utilizar ropa de cama, si hay alérgicos al polvo en casa, a prueba de alérgenos.
- Retirar el polvo doméstico con paños humedecidos y secar a continuación.
- No usar alfombras.
- Peluches lavables.
- Aspirar tapicerías y suelos a diario utilizando una aspiradora con bolsa de doble capa o un filtro de partículas HEPA.
- Permitir la entrada de la luz del sol durante las máximas horas del día y ventilar a menudo.
- Instalar filtros de partículas en el aire acondicionado y en la caldera. Cambiar el filtro cada tres meses.