La plataforma DocentsCAT, que reúne a profesores de lengua y literatura catalana, reclama una hora más de clase a la semana en 1º y 2º curso de bachillerato dado los niveles “cada vez más alarmantes” de expresión oral y escrita y de comprensión lectora de los alumnos de ESO y bachillerato, que les perjudican “gravemente” en el aprendizaje de otras materias.
Aprovechando la reorganización horaria prevista por el Departament de Educació que propone dotar de una hora más a matemáticas y reforzar las materias científicas, vuelven a insistir en recuperar la tercera hora semanal de lengua.
Esta demanda no es nueva, ya constaba en el primer punto del decálogo presentado por esta agrupación hace un año, antes de que el Ministerio de Educación y FP requiriera a la Generalitat que cambiara el currículum para adaptarlo a la ley de educación Lomloe y, entre otras consecuencias, las literaturas catalana y castellana pasaran a ser materias optativas.
Las autonomías que tienen dos lenguas oficiales imparten 3 horas a la semana y no 2 como en Catalunya
Entonces, en enero de 2024, como ahora, los profesores de catalán solicitaban recuperar la tercera hora semanal que se perdió en 2008 con un “un impacto muy negativo en el aprendizaje y el desarrollo competencial del alumnado”, sostienen en un comunicado.
Asimismo, según exponen, las dos horas de dedicación actual no permiten impartir educación literaria que, según el currículo, también debería ser competencial. “Recuperar esta tercera hora permitiría que los alumnos profundizaran en serio en el conocimiento de la lengua y de la literatura, sobre todo ”, afirman.
Lamentan que con dos horas a la semana no pueden dar educación literaria
Argumentan que esta tercera hora se ha mantenido siempre en el País Vasco, Galicia, Baleares y la Comunidad Valenciana, todas con lengua propia, además del castellano. “Si la reorganización del bachillerato pretende homogeneizar esta etapa en todo el Estado español, hace 17 años que Catalunya está fuera de la legalidad”.
Entre otros puntos, se muestran en desacuerdo con las declaraciones de la responsable de Educació, Esther Niubó, sobre el uso del catalán en las aulas. “Pedimos rigor en la respuesta: la inmersión lingüística no se aplica desde hace años y la consellera lo sabe”, alertan.
Piden que Educació compruebe las materias que “realmente” se imparten en catalán. “El uso de catalán se encuentra en un estado de emergencia y padece un proceso de sustitución lingüística”, insisten.
También denuncian que el nivel de C1 que, en teoría alcanzan los alumnos al acabar la escolarización, “prácticamente nunca” se corresponde con el nivel real. “La certificación solo sería válida si se implantasen exámenes externos”.