Las críticas del colectivo trans a J.K. Rowling encienden el debate en Europa
Polémica
Sexo y género, la obra más difícil de la creadora de Harry Potter
J. K. Rowling, autora de la serie de Harry Potter, ha hecho que la polémica que enfrenta a feministas y parte del movimiento trans haya pasado de las fronteras internas de cada país a escala internacional. Aunque llueve sobre mojado, el controvertido debate ha partido de un tuit de la autora inglesa, en el que respondía críticamente a la definición de las mujeres como “gente que menstrúa”.
“Estoy segura –escribía Rowling- que había una palabra para definir a esta gente. Wumben? Wimpund? Woomud?”. Jugaba así irónicamente la autora con la palabra inglesa women (mujeres) poniendo en solfa las tesis del movimiento trans que desvincula el concepto de mujer con el sexo biológico.
Feministas enmiendan la ley de Libertad Sexual al alegar que niega el principio de la violencia de género
Es decir, entraba de lleno como ya lo había hecho un año antes en un debate que crece en todos los movimientos feministas en torno al género y el sexo. ¿Es el genero una identidad? ¿Puede cualquier persona autoidentificarse sin más como mujer?
El feminismo clásico o de la igualdad, y allí está Rowling, entiende que no, que el género es una construcción social sobre la que el machismo ha construido un mundo desigual para las mu-jeres.
El tuit fue tachado de transfóbo. Daniel Radcliffe (actor intérprete de Harry Potter) y Emma Watson (intérprete de Hermione) se mostraron en desacuerdo. Watson pedía que no se cuestione constantemente a las personas transgénero. Algunos trabajadores de la editorial Hachette, en la que se publicará su próximo libro, amenazan con el boicot.
Pero también ha recibido un sinfín de apoyos que entienden que estas tesis del movimiento trans atacan directamente los principios del feminismo, la lucha contra la discriminación por el hecho de haber nacido mujer. Y se subraya que se confunde lo que es la lucha contra una desigualdad estructural, la que sufren las mujeres por el hecho de serlo, con la defensa de los derechos de una minoría. Se advierte así sobre el intento de “borrar” a las mujeres para diluir su lucha.
Desde los colectivos trans, en cambio, se entiende que el género es una vivencia interna, personal intransferible que hacen a una persona ser hombre o mujer independientemente del sexo asignado al nacer.
Rowling publicó este 10 de junio un artículo para expresar a fondo sus opiniones sobre los conceptos de género y sexo, donde revelaba también que fue víctima de violencia machista en su primer matrimonio. Con él quería profundizar, más allá del tuit, en sus tesis.
Un largo artículo en el que entre otras muchas cuestiones denuncia las duras amenazas que las feministas reciben cada vez que ponen en duda el género como una identidad. Rowling había regresado a su cuenta de Twitter en esta pandemia para explicar una de sus obras para niños, una cuenta que dejó en el 2019 por una polémica similar.
En España, el debate está presente y candente. La Alianza contra el Borrado de las Mujeres, que agrupa a diversos colectivos feministas, ha salido en apoyo de Rowling. Pero al margen de este gesto, en la última semana han presentado enmiendas al anteproyecto de ley de Libertad Sexual al entender que la confusión entre “sexo” y “género” crea indefensión para las mujeres. Se pide que se eliminen la expresión “identidad de género”. Y subrayan que de esta manera se niega “la realidad material del sexo que está en el origen de la violencia y la discriminación que sufren las mujeres”. Es un retroceso, se señala, que se acerca a “los postulados de la extrema derecha” al negar la violencia que sufren las mujeres por el hecho de serlo.
En el diario francés Le Figaro se publicó la semana pasada una tribuna firmada por decenas de activistas feministas de apoyo a Rowling donde se hacía referencia al “miedo con el que viven” muchas lesbianas ante el “activismo trans extremo”. Se reclama espacios exclusivos para las mujeres lesbianas (igual, dicen, que los tienen los gays o los colectivos trans). Un artículo donde también se cuestionan los procesos de transición de los menores.
El debate se agranda y salta las fronteras.