Hace unos días, el programa de Televisión Española Mañaneros se hizo eco de la historia de un joven que, al pedir un teléfono móvil por una conocida plataforma de compra de aparatos electrónicos, recibió una lata de comida para gatos.
El chico fue entrevistado por Adela González en el espacio de La 1, donde declaró sentirse completamente impotente y perdido. Además, explicó a la audiencia del canal público que sabía de muchas otras personas que habían pasado por la misma situación.

Álvaro en 'Mañaneros'
Esta mañana, la presentadora ha anunciado que, tan solo dos semanas después de le entrevista al joven estafado, otro hombre ha sido víctima del mismo engaño: Manuel. En este caso, el afectado intentó comprar un móvil para su hija, quien estaba a punto de cumplir la mayoría de edad. Sin embargo, al abrir el paquete, se quedó en shock al encontrar una lata de comida para gatos.
Nada más conectar con Manuel, Adela le ha preguntado qué cara se le quedó cuando abrió la bolsa y descubrió que había recibido otra cosa. ''Pues me salieron garras de gato en las manos cuando vi yo el paquete encima del sofá. Hay que tomarlo con humor'', ha expresado el invitado, mientras la periodista no podía evitar reírse al imaginarse una situación tan surrealista.

Adela González y Manuel en 'Mañaneros'
''Realmente ahí empezó un ir y venir de reclamaciones, de quejas y protestas con la plataforma, Amazon, total para que no me solucionaran nada'', ha explicado Manuel. González le ha preguntado si, al menos, ha recibido ya el reembolso del dinero, a lo que el entrevistado ha respondido que no, que todavía está a la espera, ya que ha presentado una denuncia.
En cambio, cuando inició las reclamaciones, Manuel tuvo que enviar de vuelta la lata: ''Me contestaron con un correo electrónico diciéndome que mi pedido no contenía el pedido adecuado, por lo que no podían ayudarme con este tema (...) Querían que yo comprara uno (un móvil) y se lo mandara para allá''.
Una situación complicada
Aunque la hija de Manuel pudo recibir finalmente su regalo porque sus padres le compraron otro teléfono móvil en una tienda física para evitar cualquier tipo de estafa, el hombre ha decidido visibilizar su situación y dar a conocer esta problemática.
Todos los colaboradores han expresado su malestar por el engaño que ha sufrido Manuel, pero algunos han opinado que hay que tener cuidado, ya que también podría darse una estafa a la inversa: que muchas personas empiecen a pedir móviles y luego aseguren (falsamente) haber recibido latas de comida para gato.