Jorge Javier Vázquez se planta en la casa de Íñigo Onieva para “limpiar su imagen”
‘Sálvame’
El presentador de ‘Sálvame’ vuelve a salir a la calle y acude al domicilio de la madre del exnovio de Tamara Falcó en pleno culebrón mediático
Jorge Javier Vázquez parece haberle cogido el gusto a hacer visitas a domicilio en directo. Tras su aparición estelar la semana pasada en la casa de Conchi, hermana de José Ortega Cano, con entrevista en la cocina y manzanilla incluida, el presentador de Sálvame ha pisado la calle nuevamente.
Y lo ha hecho para plantarse en el domicilio de Íñigo Onieva, uno de los protagonistas más mediáticos de los últimos días tras su pillada siéndole infiel a Tamara Falcó. Jorge Javier tenía una misión: darle una solución a sus problemas. Y, ¿qué mejor que someterse al polígrafo de Conchita?
Ataviado con una chupa de cuero negra, gafas de sol y micrófono en ristre, Jorge Javier Vázquez arrancaba el directo de Sálvame a las puertas de la casa de la madre de Íñigo Onieva. “Esto está como si fuese la casa de Psicosis, que no hay nadie”, aseguraba al inicio de la conexión. “
No habrá en España persona con peor reputación que Íñigo Onieva. Y si a lo mejor Íñigo dice: ‘Yo no soy así, yo soy una bella persona’, y necesito que alguien me crea. Pues Íñigo: ‘Aquí estamos nosotros para ofrecerte la solución’”, proseguía generando gran expectación. A lo que Adela González apuntaba un: “Esto es un servicio público”.
“Eso es, ayer Tamara Falcó nos dio las gracias por abrirle los ojos. Y hoy podemos hacer que Íñigo Onieva revele ante España como una persona con numerosísimos principios”, añadía Vázquez a colación del comentario de su compañera.
Entonces, el presentador se acercaba al maletero de un coche, lo abría y mostraba un aparato con numerosos cables: era el polígrafo de Conchita, el utilizado en el Deluxe para corroborar quién dice la verdad y quién miente. “Está aquí la solución”, dijo asegurando que la experta se encontraba en Telecinco a la espera de que Íñigo Onieva realizase esta prueba de amor para Tamara Falcó.
“Pero si esto no sucede, redoblamos la apuesta: invitamos a cualquier persona que lo acredite del círculo más íntimo de Íñigo Onieva para ayudar a la limpiar su imagen”, afirmaba.
“Podría ser además de infiel, trilero de cabo a rabo. Por eso le vamos a dar la oportunidad de que se redima. Nadie mejor que yo, un personaje conocedor de la noche y de lo que ello comporta, para acercarme a Íñigo y tenderle una mano y decirle: tienes la oportunidad de dar a conocer tu verdad al mundo entero”, continuaba el presentador.
Porque “nadie mejor que yo lo va a entender. Yo me he recorrido todas las noches de Madrid, sé lo que pasa en los festivales... lo he practicado incluso. En mí va a encontrar un compañero de fatigas muy comprensible”.
Sin embargo, ni Íñigo Onieva salió de la casa de su madre, ni tampoco nadie de su círculo más íntimo se personó para aceptar la oferta del polígrafo, al menos por el momento. De hecho, ya desde el plató, Jorge Javier comentó que fuentes que maneja el programa consiguieron saber cómo está el exnovio de Tamara Falcó.
“Pero si esto no sucede, redoblamos la apuesta: invitamos a cualquier persona que lo acredite del círculo más íntimo de Íñigo Onieva para ayudar a la limpiar su imagen”, afirmaba. “Íñigo está absolutamente destrozado y está llorando sin parar”, dijo el presentador. “La he perdido para siempre, está demasiado entera”, fueron las palabras que dijo el empresario según Sálvame.