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‘Supervivientes 2020’: Fani a punto de desmayarse por un ataque de ansiedad

‘Supervivientes 2020’: Fani a punto de desmayarse por un ataque de ansiedad

Mediaset

Durante la última entrega de Supervivientes 2020: Conexión Honduras , los servicios médicos del programa tuvieron más trabajo del habitual. No solo por el doloroso percance que sufrió Ana María Aldón durante la prueba de recompensa que le hizo pegar gritos y que Lara Álvarez acudiese en su ayuda, sino también por el mareo que tuvo Fani debido a la falta de comida.

La exparticipante de La isla de las tentaciones es una de las concursantes que más peso ha perdido desde su llegada a Honduras y le está haciendo mella. Tanto es así que tras casi perder el conocimiento también sufrió un ataque de ansiedad. El médico de Supervivientes tuvo que hacerle un reconocimiento.

‘Supervivientes 2020’: Los compañeros de Fani la tras sufrir un mareo

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Tras mes y media de aventura, los supervivientes ya están empezando a notar los efectos del hambre. La falta de alimento lo están pagando caro, pero no hablamos de ahora que con la unificación están consiguiendo pescar y comer algo más, sino por el cúmulo de calorías desgastadas. A esto hay que sumarle el calor y estar todo el día al sol. Todo ello está provocando en algunos concursantes momentos de inestabilidad física.

En el caso de Fani, todo comenzó cuando quiso ponerse a pescar para dedicárselo a su hijo por su cumpleaños. Durante largo rato, la joven estuvo expuesta al sol y en un momento determinado se encontró mal. Le dio un fuerte bajón.

‘Supervivientes 2020’: Fani sufre un mareo

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‘Supervivientes 2020’: Los servicios médicos atienden a Fani tras sufrir un mareo

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Jorge y Elena se dieron cuenta del mareo que le estaba dando a Fani y decidieron acudir en su ayuda. “Estoy como ida, no me sueltes”, decía Fani a sus compañeros, que la tumbaron y pusieron sus pies sobre un tronco. Pese a sus diferencias, Jorge fue uno de los que más estuvo atendiendo a la concursante haciéndole distintas preguntas para que no perdiese el conocimiento: “¿Cuántos años cumple tu hijo” o “no cierres los ojos”. Porque “a pesar de todo lo que nos ha pasado no deja de ser una persona y una compañera”, razonaba después el guardia civil.

Poco después llegó el equipo médico y confirmó lo que todos se imaginaban: que estaba sufriendo un ataque de ansiedad. “Te están jugando una mala pasada los nervios”, le dijo el médico.