Apple permitirá a sus usuarios que decidan si quieren que Siri grabe sus conversaciones

Apple ha detallado los cambios que realizará en la protección de privacidad de su asistente personal Siri en un comunicado en el que admite algunos errores en sus prácticas y políticas, lo que ya motivó la suspensión del el programa de control de calidad de Siri a principios de agosto.

La compañía pide disculpas y anuncia que sus usuarios decidirán si quiere participar o no en la evaluación de la calidad del asistente cuando se retome este programa en otoño: “Como resultado de nuestro análisis, hemos llegado a la conclusión de que no hemos estado totalmente a la altura de nuestros elevados ideales y pedimos disculpas por ello. Como anunciamos anteriormente, hemos interrumpido el programa de evaluación de Siri. Pensamos retomarlo en otoño cuando las actualizaciones de software estén disponibles para los usuarios”, dice el mensaje.

El usuario tendrá el control

Los cambios que se realizarán consisten en:

- Ya no se conservarán por defecto grabaciones de audio de las interacciones con Siri. Se seguirán usando transcripciones generadas por ordenador para ayudar a mejorar Siri.

- Los usuarios podrán activar la opción de ayudar a mejorar Siri mediante el aprendizaje a partir de muestras de audio de sus peticiones. Las personas que decidan participar podrán retirarse en cualquier momento.

- Si un usuario decide activar la opción de ayudar a mejorar Siri, solo empleados de Apple podrán escuchar las muestras de audio de las interacciones con Siri: Nuestro equipo borrará toda grabación en la que se determine que no había intención de activar Siri”, asegura Apple.

En iOS se podrá ver el detalle de los datos a los que accede Siri y cómo se protege la información durante el proceso entrando en Ajustes > Siri y Buscar > Acerca de “Consultar a Siri” y la Privacidad.

Programa en revisión hasta el otoño

A finales de julio, un reportaje de The Guardian recogía las declaraciones de varios empleados de Apple que se dedicaban a escuchar las conversaciones que los usuarios tenían con Siri y evaluaban si todo funcionaba correctamente.

De forma anónima, estos empleados contaron que entre los audios que analizaban se encontraba también información privada y sensible del usuario, lo que llevó a que Apple a reconocer que existía un equipo de empleados dedicado a revisar las interacciones con el asistente, pero que suponía menos de un 0,2 por ciento.

Apple revisó su proceso de evaluación de la calidad y a principios de agosto lo interrumpió temporalmente. La intención de la compañía era retomar este proceso tras el lanzamiento de una actualización de ‘software’ que permitiría al usuario decidir si quiere participar en él o no.

Con estos cambios, la compañía espera que “muchas personas elijan contribuir a la mejora de Siri sabiendo que Apple respeta sus datos y cuenta con estrictos controles de privacidad”. Los planes de la compañía pasan por retomar el proceso de evaluación de la calidad de Siri en otoño, cuando las actualizaciones de ‘software’ estén disponibles para los usuarios.