Dicen que al músculo hay que sorprenderlo para que crezca, pero nadie imaginaba que alguien lo interpretaría de manera tan literal. La teoría detrás de la variación en los entrenamientos es clara: cambiar la rutina evita que el cuerpo se acostumbre y así se logran mejores resultados. Sin embargo, un vídeo que circula en TikTok muestra un caso que ha generado más risas que músculo.
En la grabación se ve a una chica en el gimnasio, aparentemente preparándose para hacer un ejercicio de glúteos. Ha sujetado un agarre a sus tobillos y enganchado la cuerda de una polea baja, lo que sugiere que está a punto de realizar una patada trasera, un movimiento común en las rutinas de piernas.
Ejercicio juzgado
Un movimiento inútil para desarrollar músuclo
Normalmente, este ejercicio consiste en estirar la pierna que lleva la sujeción, venciendo la resistencia de la máquina para trabajar los músculos de la parte posterior del muslo y romper sus fibras si se les aplica la suficiente tensión.
Lo sorprendente es que, en lugar de levantar la pierna que tiene el agarre, utiliza la otra. El resultado es que el movimiento queda completamente inútil: su pierna se balancea en el aire sin ningún tipo de carga o esfuerzo, mientras la polea permanece tensa sin ejercer resistencia.
El vídeo ha causado revuelo en redes sociales, donde muchos han reaccionado con humor a la confusión. Los comentarios han estado llenos de bromas y memes, con usuarios que han ironizado esta técnica revolucionaria: “Le está enseñando a la otra pierna cómo hacerlo”. Otro indicó que el músculo quedó realmente sorprendido.
Sin embargo, no todos han visto la situación con gracia. Algunos han criticado la práctica de grabar a personas desconocidas en el gimnasio para burlarse de ellas. Este tipo de vídeos, aunque puedan resultar divertidos para algunos, también han reabierto el debate sobre el respeto en los espacios de entrenamiento y la exposición de quienes aún están aprendiendo a usar las máquinas. “Por cosas así me da pánica ir al gimnasio”, dijo una chica.
El caso de esta chica ha servido para recordar que en el gimnasio es fácil cometer errores, sobre todo cuando se es principiante. Más allá de la anécdota y el revuelo en redes, lo importante es que cualquiera puede mejorar con el tiempo y la práctica, siempre que tenga la orientación adecuada.