La tensión entre Junts per Catalunya y Esquerra Republicana se ha palpado este miércoles durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso, a cuenta del caos en Rodalies. El diputado de JxCat, Isidre Gavín, aprovechó en su pregunta al ministro de Transportes, Óscar Puente, para acusar a los republicanos de prestar una “ayuda inestimable” al Gobierno para que “Renfe siga operando el servicio” pese al acuerdo para el traspaso del mismo. Las palabras de Gavín han irritado a las filas de ERC, cuyo portavoz, Gabriel Rufián, ha llamado “miserable” al posconvergente.
Isidre Gavín ha manifestado a lo largo de su intervención que “las infraestructuras que dependen del Estado en Catalunya están en quiebra permanente”, siendo Rodalies un caso de “auténtico escándalo”. Para Junts, el trato dispensado a los usuarios catalanes es “insostenible” y creen que “deberían estar rodando cabezas”.
En este contexto, el parlamentario de JxCat en la Cámara Baja ha lamentado que “cuando el Gobierno no cumple los presupuestos ni las previsiones de inversión cada año y lo denunciamos, lo niegan”. “También cuando hacen un traspaso, su prioridad y la de sus cómplices en la Generalitat, con la ayuda inestimable de Esquerra, es que Renfe continúa operando el servicio y todo siga igual”, ha subrayado.
Tras estas palabras, el diputado de Esquerra, Jordi Salvador, quiso hacer una previa antes de preguntar al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, para referirse a las palabras de Isidre Gavín. El republicano le pidió que “no mienta relacionando el caos de Rodalies con Esquerra” porque es de “ser muy miserable”. “Y soy muy generoso con el adjetivo”, ha añadido Salvador.
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Con posterioridad a este choque entre ambas formaciones independentistas, el portavoz de Esquerra Republicana, Gabriel Rufián, también ha cargado en una atención a los medios contra Isidre Gavín: “Lo único que sé de él es que lleva 30 años yendo en coches oficiales y que ha cogido muy poquitos trenes de Rodalies. Yo llevo 25-30 años cogiéndolos. Es un miserable y un mentiroso”.
A lo largo de sus declaraciones, Rufián ha querido “pedir a Convergència, a Junts, a la derecha catalana” que “deje de hacer política” con esta cuestión“: ”Esperemos que nos ayuden, aunque sea por una vez en su vida, a intentar solucionarlo porque la gente que coge cada día un tren de Rodalies no se merece escuchar a la derecha catalana culpando a todo el mundo menos a ellos mismos de lo que sucede".