La vicepresidenta Teresa Ribera ha denunciado este miércoles, en la sesión de control del Congreso, que el Partido Popular ha tratado de “imputar” al Gobierno, a través de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y de la Confederación Hidrográfica del Júcar, “la incompetencia de los responsables en materia de Protección Civil y Emergencias” de la Generalitat valenciana de Carlos Mazón, ante la tragedia desatada por la DANA del pasado 29 de octubre. “Si consideran que es dogmatismo climático, si consideran que la información no es confiable, si se burlan de los avisos rojos de Aemet, es muy difícil extraer conclusiones que nos preparen para reaccionar bien ante la siguiente calamidad”, ha replicado Ribera ante la dura ofensiva de la bancada popular, que ha exigido a gritos su dimisión.
La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ya se sometió la semana pasada a un duro examen en el Parlamento Europeo, bajo el fuego de artillería pesada del PP y Vox por la gestión de la DANA en la Comunidad Valenciana, para defender su candidatura a la vicepresidencia de la Comisión Europea de Ursula von der Leyen. Pero este miércoles, Ribera está afrontando un nuevo examen en su propio país, de nuevo ante la fuerte oposición de la derecha, con sendas comparecencias matutinas y vespertinas en el Congreso y el Senado. El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ya la ha recibido con cajas destempladas esta mañana a la entrada del hemiciclo del Congreso, al advertir que Ribera es “una mala candidata” y “un mal nombramiento para España y para Europa”. Y eso que, la víspera, Pedro Sánchez le advirtió de que, para defender a Mazón, no puede atentar contra los intereses del Estado autonómico, de España y de Europa.
En línea con Feijóo, los portavoces del PP Miguel Tellado y César Sánchez ya han aprovechado la sesión de control al Gobierno en el Congreso, antes de la comparecencia monográfica que después va protagonizar Ribera, para reprochar con dureza a la vicepresidenta tercera su gestión de la tragedia. Ambos han afeado a Ribera que, en 21 días, no haya tenido ocasión aún de visitar València para comprobar la magnitud del desastre. Tellado ha definido a Ribera como “una ministra huida, una ministra a la fuga”, pese a ser “la principal responsable en materia hidrológica” en España. “Ha sido un fraude electoral y es un fraude político sin precedentes en la historia de nuestro país”, ha criticado.
“No sé cómo es capaz de dormir tranquila por las noches”, le ha advertido Tellado. Y ha asegurado que Ribera “va a pasar bastante tiempo declarando en los juzgados” por las riadas en la provincia de València. El portavoz del PP ha dudado así de que Ribera esté capacitada para ser comisaria europea: “¿Si le imputan arrastrará a toda la Comisión Europea con su imputación?”. Tellado ha tachado a la vicepresidenta de “incompetente, intransigente y tremendamente egoísta”, además de acusarla de “indolencia”. Y ha advertido de que, si hubiera hecho su trabajo, “se hubieran salvado muchas vidas”.
Ribera se ha defendido. “Es importante pedir explicaciones a cada cuál por lo que es su responsabilidad”, ha replicado a la bancada del PP, en velada alusión a Mazón. Y pese ha señalado que “por supuesto visitaré València”, ha recalcado: “No voy a hacerme fotos, sino a trabajar”.
La vicepresidenta tercera, no obstante, ha sido fuertemente increpada por la bancada popular. Y el diputado César Sánchez ha recogido el testigo de Tellado para acusar a Ribera de “una gestión claramente negligente”, además de reclamar su dimisión. “No merece estar sentada en ese banco azul ni un minuto más”, ha advertido. Pero Ribera ha insistido: “Es una pena que hasta en la embajada de Japón entiendan lo que significa un aviso rojo de la Aemet, pero al responsable de Protección Civil y Emergencias, que es la Generalitat valenciana, le cueste tanto reaccionar”.
Ribera responsabiliza al Gobierno de Rajoy de frenar las obras de protección del barranco del Poyo
Ante las acusaciones del PP, Ribera ha asegurado que fue precisamente ella, como secretaria de Estado de Cambio Climático en diciembre del 2011, quien firmó la declaración de impacto ambiental favorable para actuar en el barranco del Poyo. Pero ha señalado que esta intervención caducó en el 2017, debido a la “falta de actuación del Gobierno de Mariano Rajoy”, por su “inacción e inactividad”. Ya en el 2018, y ya como ministra para la Transición Ecológica, ha asegurado que el Gobierno recuperó estas obras de emergencia. “Y nos encontramos de nuevo con problemas y falta de consenso en el territorio”, ha alegado. “Fue una pena que las obras de protección del barranco del Poyo no se ejecutaran cuando tocaban, a partir de enero del 2012. Y fue una pena que costara tanto poner orden en el caos de las obras declaradas de interés general por parte del Estado, con los terrenos ya expropiados, cuando llegamos en junio del 2018 al Gobierno”, ha lamentado Ribera.
La vicepresidenta recalca que la dirección de la emergencia correspondía a la Generalitat valenciana y afirma: “No vivimos en un Estado fallido”
Ya en su posterior intervención ante el pleno del Congreso, Ribera ha empezado por delimitar las competencias ante la tragedia: “Cuando nos enfrentamos a una situación de riesgo, como se la que se produjo el 29 de octubre, la dirección de la emergencia corresponde a la administración autonómica. En este caso, a la Generalitat Valenciana”. Pero ha defendido la información y los avisos tanto de la Confederación Hidrográfica del Júcar como de la Aemet. En concreto, ha resaltado que los avisos rojos de la Aemet, que indican un “nivel de riesgo muy alto” y son “muy excepcionales”, son los más importantes para dar una “respuesta anticipada” y “minimizar daños”. Y el primero de sus avisos rojos, ha recordado, se emitió el martes 29 de octubre a las 7.31 h. de la mañana.
Pero la vicepresidenta ha advertido que de nada sirve que estas alertas funcionan, si quien tiene que responder de inmediato, en este caso a su juicio la Generalitat valenciana, no sabe hacerlo. “De poco sirve tener toda la información necesaria si quien debe responder no sabe cómo hacerlo”, ha señalado. Ribera ha replicado a algunas acusaciones de Carlos Mazón: “Nunca hubo apagón informativo”. Y también a algunas denuncias que ha atribuido a los negacionistas climáticos: “Este Gobierno no ha eliminado presas, sino azudes”. “No vivimos en un Estado fallido, vivimos en un Estado de derecho, con unos servicios públicos que funcionan”, ha zanjado.
La réplica del PP
La oposición acusa a la ministra Ribera de incompetencia y de falta de empatía y de integridad en la gestión de la emergencia
Por parte del PP, la diputada Esther Muñoz, vicesecretaria de sanidad y educación de la ejecutiva de Alberto Núñez Feijóo, ha exigido el compromiso de Ribera de dimitir si resulta imputada y ha acusado a la ministra de falta de empatía y de integridad durante la tragedia, que, a su juicio, la invalida políticamente para tener una cargo político en Europa. “Con nuestros votos no va contar”, ha asegurado para denunciar que el PSOE ha pedido en Bruselas el voto de los partidos de extrema derecha de Giorgia Meloni y Viktor Orbán para desencallar la situación.
“Usted en teoría ha dedicado su vida profesional a preparar a nuestro país para catástrofes como la que ha sucedido, pero ha demostrado trabajar para sí misma”, ha exclamado la diputada popular, que ha acusado a la ministra de mentir: “Lleva seis años diciendo que hay que cerrar minas, térmicas, nucleares y no limpiar nuestros ríos y nuestros bosques y a imponer su dogmatismo climático”, ha sentenciado Muñoz, para quien lo que “mitiga” este tipo de catástrofes naturales son las obras hidráulicas y la inversión en infraestructuras como el encauzamiento del barranco del Poyo, que, según ha criticado, se paró en el 2021. “No ha hecho nada en seis años, no le eche la culpa a Mariano Rajoy. Esta obra de ingeniería hubiese evitado las inundaciones y solo costaba 35 millones de euros. ¿Cuántas vidas se hubieran salvado?”, ha concluido.
Las víctimas mortales por la DANA en Valencia aumenta a 220
La cifra total de víctimas mortales registrada a causa de la Dana ha aumentado a 220, tras el levantamiento del cuerpo sin vida de una mujer en Torrent, mientras que el número de desaparecidos se mantiene en ocho, según el Centro de Integración de Datos (CID) y que ha sido actualizado este miércoles.
A los 220 fallecidos se les ha practicado la autopsia y 219 de ellos están plenamente identificados: 170 por huellas dactilares, 45 por análisis de ADN y 4 por identificación hospitalaria en vida. Por tanto, está pendiente de identificación la última víctima mortal.