Nuet afronta su juicio por desobediencia en el ‘procés’: “Europa condenará a España”
Juicio en el Supremo
El diputado republicano alega que él "no quería proclamar la independencia sino ordenar un debate democrático”
El diputado de ERC Joan Josep Nuet
La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo celebra a partir de este miércoles el juicio al diputado de ERC Joan Josep Nuet por un presunto delito de desobediencia por su actuación como miembro de la Mesa del Parlament en relación al 'procés' independentista. El juicio llega cinco meses después de que sus compañeros en el órgano rector parlamentario de entonces fueran condenados por el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) a a 20 meses de inhabilitación y 30.000 euros de multa. Antes de iniciar el juicio, Nuet ha defendido su actuación y ha advertido de que, en este caso, como en otros que afectan al ‘procés’, “Europa se pronunciará y condenará a España”.
Su condición de parlamentario en el Congreso hace que el juicio se lleve a cabo en el Supremo, mientras que el resto de miembros la Mesa del Parlament de 2017, que ya no tienen escaño, fueron condenados ya en la que fue la segunda condena que se dictaba contra los cargos públicos y líderes independentistas del ‘procés', después del fallo del Tribunal Supremo en la causa del 1-O.
Hacer callar tus adversarios políticos o ponerlos en prisión es un grave error, nunca podrán ganar haciendo que el debate se silencie, lo único que harán es retrasar sus razones pero no enterrar”
A la entrada del Supremo, Nuet ha augurado que “Europa al final se pronunciará y condenará España, como ya ha pasado por ejemplo en Polonia”. Y ha lanzado una clara advertencia a quienes cree que “el tema va a quedar enterrado”: “Se equivoca” porque "hacer callar tus adversarios políticos o ponerlos en prisión es un grave error, nunca podrán ganar haciendo que el debate se silencie, lo único que harán es retrasar sus razones pero no enterrar”.
El diputado ha lamentado que la ley de amnistía propuesta por los partidos independentistas no haya superado siquiera la tramitación pero ha justificado su actuación como miembro de la Mesa pese a las advertencias del Tribunal Constitucional en aquella época. “Yo no quería proclamar la independencia sino ordenar un debate democrático”, ha aclarado. En este sentido, ha insistido en la necesidad de “hablar de todo” cuando “no hay un marco de violencia” y se ha mostrado de acuerdo en que el TC “diga la última palabra, pero no de forma previa”. En este punto ha evidenciado que aunque el Parlament no tenga competencias en el asunto de la independencia, tampoco las tienen los ayuntamientos en materias internacionales pero aprueban por ejemplo mociones de solidaridad con el Sahara.
Los miembros de la Mesa del PArlament de 2017
“Mi grupo defendió el debate dentro del marco constitucional”, ha insistido, y “la mejor manera de cumplir la Constitución es permitiendo los debates democráticos en el Parlament”. Nuet ha asegurado que no está “nada preocupado” porque “la democracia tiene unos varemos que hay que defender a capa y espada”, pero “si los debates se analizan antes en un tribunal, estamos muertos”.
El diputado considera que este proceso “es un retroceso que pagaremos muy caro”, porque los debates deben pasar por los parlamentos y no intervenir “de forma previa” porque esto “incita a unos prejuicios sobre lo que se puede hablar y lo que no”. Y esto puede provocar que “hoy no se puede hablar de independencia y mañana será de república o feminismo”, ha avisado.
Los miembros de la Mesa del PArlament de 2017
El tribunal puso fecha a esta vista oral un año después de que el TSJC le remitiera una exposición razonada para que se hiciera cargo de su enjuiciamiento tras ser elegido diputado en las elecciones generales del 10 de noviembre de 2019, por lo que adquirió la condición de aforado.
El Supremo había acordado enviar al TSJC la investigación y posterior enjuiciamiento de los miembros de la Mesa del Parlament que votaron a favor de la tramitación de diversas iniciativas parlamentarias relacionadas con el proceso independentista en Catalunya, exceptuando a la que fuera presidenta de la cámara parlamentaria Carme Forcadell, ya condenada a 11 años y medio de prisión por sedición. Tras adquirir Nuet de nuevo la condición de aforado, el pasado mes de marzo asumió la competencia para juzgarle.