Celaá acusa a Iglesias de querer hacer “un gobierno dentro del Gobierno”
La investidura
La ministra considera que la propuesta de Podemos “socavó la confianza” e insiste en que la propuesta del ejecutivo de coalición está enterrada
Isabel Celaá ha denunciado que Pablo Iglesias intentó “hacer un gobierno propio dentro del Gobierno” y ha explicado que por esa razón fracasaron las negociaciones entre el PSOE y Unidas Podemos para formar un ejecutivo de coalición. “Las concepciones eran contrapuestas y eso socavó la confianza”, ha indicado la ministra portavoz este mediodía en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
Según el relato de Celaá, lo que impidió el pacto y provocó el fracaso de la investidura de Pedro Sánchez fue que en Podemos “pensaban que podía haber dos gobiernos en uno coordinados por presidencia y vicepresidencia” de tal manera que los ministros socialistas habrían dependido de Sánchez y los podemistas de Irene Montero. Esa opción no convenció al presidente, porque “un país necesita un gobierno único cohesionado y fuerte”.
Evitar elecciones
Ahora, la vía desgobierno de coalición está enterrada y Sánchez no tiene ninguna intención de resucitarla. A cambio, propone una salida a la portuguesa, que consistiría en que el PSOE gobernase en solitario tras cerrar un acuerdo programático con Podemos para impulsar “políticas progresistas”. El presidente en funciones se reúne estos días con la sociedad civil y los agentes sociales para “explorar esa vía” y tratar de convencer a los morados.
La portavoz ha asegurado que, tras esa ronda de contactos con sindicatos y entidades, Sánchez llamará a los líderes del resto de grupos, pues tiene la firme intención de “evitar unas nuevas elecciones”. El líder socialista ya no es candidato a la investidura, pero podría intentarlo de nuevo en septiembre. No obstante, esa segunda investidura no es en este momento algo asegurado. Celaá no ha querido concretar si Sánchez pasará de nuevo por el Congreso en busca de la presidencia en caso de que no tenga los apoyos necesarios asegurados. “Si esa mayoría no existe, el presidente tomará sus decisiones”, ha remarcado.
Y ha insistido en que Sánchez no hará vacaciones y dedicará el mes de agosto a buscar esa mayoría suficiente que le dé la investidura sin el apoyo de las fuerzas independentistas y evite la repetición electoral. La de Podemos no es la única alternativa que explorará. Su plan B pasa por conquistar la abstención de PP y Ciudadanos, aunque sabe que es una misión casi imposible, porque tanto Pablo Casado como Albert Rivera ya le han dicho por activa y por pasiva que no facilitarán su investidura.
Y menos aún después de que la socialista María Chivite se convertirá esta noche en presidenta de Navarra gracias a la abstención de Bildu. Celaá ha restado importancia a ese hecho y ha recordado que “el Partido Socialista de Navarra no ha pactado con las fuerzas independentistas”. Pero en el PP no lo ven del mismo color. La portavoz popular en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, denunció ayer ese apoyo de Bildu a Chivite y se mostró convencido de que lo mejor sería una repetición electoral.
El PP debería abstenerse como el PSOE en 2016”
Pese a eso, Celaá ha insistido en que “el PP debería abstenerse como el PSOE en 2016” cuando Mariano Rajoy logró ser presidente del gobierno gracias a la abstención del PSOE, que Sánchez rechazó, lo que le llevó a dejar su escaño. “Fue un gran esfuerzo interno, que se hizo por respeto institucional”, ha señalado la portavoz, quien ha reclamado por enésima vez a los populares que hagan “lo mismo que se nos pidió y nosotros hicimos”.