El Gobierno envuelve sus presupuestos con claros mensajes contra Vox

El Gobierno central ha aprobado su proyecto de presupuestos que el próximo lunes llegará a las Cortes con claras apelaciones a la actual situación política, marcada por el auge del partido de ultraderecha Vox en todas las encuestas tras los comicios andaluces, y la negativa que en principio dan los partidos independentistas a la tramitación de las cuentas. En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la ministra portavoz y la de Hacienda han hecho especial hincapié en unos presupuestos que buscan “huir de un pasado en blanco y negro” y defienden el diseño territorial frente al “centralismo predemocrático” que algunas formaciones defienden.

“Ni división, ni centralismo predemocrático”, ha rechazado la ministra portavoz Isabel Celáa, para quien las cifras presentadas buscan “el equilibrio, el crecimiento y la unión”, antes de resaltar que las cuentas también incluyen un incremento en materia de lucha contra la violencia machista, una medida que la dirigente no tuvo problemas en asegurar que se era un claro mensaje “para aquellos que pretenden retirar ayudas o destrozar pactos que se han conseguido con mucho esfuerzo”.

Los presupuestos defienden el diseño territorial del Estado. Ni división, ni centralismo predemocrático”

Sin mencionar a Vox, la ministra también dejó claro que “más allá de las cifras, se trata de unos presupuestos para buscar un futuro y huir de un pasado en blanco y negro del que algunos estos días están teniendo nostalgia”, volvió a dedicar Celaá, que interpretó las medidas de inversión incluidas en el proyecto para las comunidades autónomas, en especial para Catalunya, suponen un “apoyo a las comunidades y reforma del modelo para fortalecerlo y no debilitarlo”.

El hecho de que Vox promueva el centralismo, la devolución de competencias autonómicas al Estado y, en definitiva, la eliminación de las comunidades autónomas, sirve al Gobierno para marcar distancias con el protagonismo que ha adoptado la formación de Santiago Abascal tras sus resultados en las elecciones andaluzas.

Las partidas de inversión previstas para comunidades como Catalunya suponen una afrenta precisamente a las posiciones de Vox que el Ejecutivo socialista considera que responden a “mejoras para la ciudadanía” y que, lejos de suponer “contrapartidas”, son “números” que pretenden el “blindaje del Estado del bienestar y de las libertades”.

El Gobierno destaca el incrementos de fondos para luchar contra la violencia machista frente a “aquellos que pretenden retirar ayudas o destrozar pactos que se han conseguido con mucho esfuerzo”

Tras garantizar que “los presupuestos cumplen con el Estatut de Catalunya”, el Ejecutivo no ha querido desgranar las cifras y se ha limitado a desvelar que se incluyen 7.572 millones para infraestructuras, lo cual supone un aumento del 40% respecto al año pasado, y que el incremento presupuestario destinado a las autonomías se eleva un 62% hasta los 110.570 millones de euros.

“Los presupuestos contienen partidas muy importantes para Catalunya y esperamos que sea suficientemente atractivo para pensar en los catalanes”, ha reclamado Celáa, que ha destacado que así se cumplirá con la antigua disposición adicional tercera, que obligaba al Estado a invertir en Catalunya lo mismo que aporta al PIB estatal. En 2017, la aportación de Catalunya al Estado fue del 19,2%.

En cualquier caso, la ministra Montero ha rechazado que esta previsión de inversión sea una contrapartida, “para nada”, ha dicho, sino que responde a la necesidad de cumplir con la ley “porque en demasiadas ocasiones no se ha hecho como corresponde”. En cualquier caso, “aquellos que defienden catalunya deberían aprobarlos”, ha animado.