Cinco aves que no te dejarán indiferente si las ves cuando pasees entre el paisaje del Urgell

Las Fotos de los Lectores

Las águilas culebrera y real, el milano real, el busardo ratonero y el abejaruco destacan cada una a su manera

Ampliar Abejarucos.

Abejarucos en medio del camino.

Josep Regí i Puig

* El autor forma parte de la comunidad de lectores de La Vanguardia

Hoy vamos a mostrar en Las Fotos de los Lectores de La Vanguardia cinco aves que no te dejarán indiferente si las ves paseando entre el paisaje de la comarca de Urgell, como en los alrededores del pueblo de Altet.

1. Milano real

Ampliar Milano real.

Milano real retratado de cerca

Josep Regí i Puig

Aunque se alimenta de presas de fácil captura, como pequeños animales, la tendencia del milano real, ave rapaz con vuelo extraordinariamente ágil, es cada vez más carroñera.

Suele anidar en árboles y pone de uno a tres huevos. En la incubación, el macho suele reemplazar a la hembra mientras ésta se alimenta.

Ampliar Milano real.

Milano real.

Josep Regí i Puig

2. Busardo ratonero

También conocido como ratonero común, águila ratonera o aguililla, el busardo ratonero se alimenta principalmente de pequeños mamíferos. Esta ave rapaz de tamaño medio y aspecto robusto realiza largos planeos en vuelo.

En general no se encuentra amenazado y el número de ejemplares aumenta, tras sobreponerse a una fuerte persecución sufrida hasta el siglo XX.

Ampliar Busardo ratonero en pleno vuelo.

Busardo ratonero en pleno vuelo.

Josep Regí i Puig

3. Águila dorada

Al igual que en la mayoría de las aves de presa, las hembras del águila dorada son mayores que los machos. Incluso llegan a medir un metro de longitud desde el pico a la cola, así como 2,3 metros de envergadura alar (el macho se queda en entre 1,8 y 2 metros).

Ampliar Águila dorada.

Águila dorada volando junto al árbol.

Josep Regí i Puig

El plumaje de esta águila es castaño oscuro, pero, como su nombre indica, se vuelve dorado en cabeza y el cuello, mientras que es blanco en los hombros y en el extremo de la cola.

Además, esta especie se incluye dentro de las llamadas águilas calzadas, ya que las patas están cubiertas de plumaje, como si fueran unos zapatos.

Ampliar Águila dorada.

Águila dorada en vuelo.

Josep Regí i Puig

Estas águilas son monógamas, con lo que se suelen emparejar de por vida. Construyen varios nidos, sobre la base de tres gruesas ramas, en varios puntos de su territorio. Los alternan cada año. como si tuvieran varias residencias.

4. Águila culebrera

El águila culebrera (Circaetus gallicus) se alimenta sobre todo de serpientes, que representan el 80% de su dieta. Las engulle empezando por la cabeza.

Ampliar Un ejemplar de águila culebrera.

Un ejemplar de águila culebrera.

Josep Regí i Puig

Esta ave rapaz, que disfruta de un buen estado de conservación, tiene una característica cabeza redondeada, gruesa, que hay quien dice que le recuerda al búho real.

El águila culebrera mide unos 63-69 cm y 185-195 cm de envergadura alar. El macho pesa entre 1.100 y 2.000 gramos y la hembra entre 1.300 y 2.700 gramos.

La parte inferior del cuerpo es de color blanco, la superior es parda y la punta de las alas son negras. Tiene unos grandes ojos, de color amarillo muy vivo.

5. Abejaruco

El abejaruco es una de las aves más vistosas, como se puede apreciar en las imágenes. Tal y como indica su nombre es especialista en capturar abejas y también otros insectos voladores.

Es un ave inconfundible, dada la multitud de colores que tiene: azul en el pecho, verdoso en el vientre, cabeza canela, cuello amarillo y una lista negra que adorna su ojo.

Les gustan las zonas donde abundan los insectos. Destacan sus colores muy vistosos, como muchos pájaros africanos, y los nidos los tienen en márgenes de caminos. Son agujeros profundos en la tierra.

Ampliar Abejarucos.

Abejarucos en un árbol.

Josep Regí i Puig
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