La igualdad y el respeto parecen retroceder cada año, en lugar de avanzar. Basta con mirar a Afganistán. El regreso de Trump al poder en Estados Unidos y el ascenso de Vox en España hacen pensar que el progreso hacia la igualdad pueda detenerse o incluso revertirse. Y preocupa igualmente cómo se gestionan nuestros recursos públicos (es desconcertante ver que se retienen fondos de áreas vitales, como la seguridad, para destinarlos a otros fines, como las corridas de toros, mientras los servicios básicos y esenciales para los ciudadanos sufren recortes) y lo poco que se hace contra el cambio climático y los consecuentes desastres naturales. La realidad me deja impotente, porque, por mucho que quiera ofrecerle a mi hija un mundo sano y seguro, parece que solo algunos tienen acceso a opciones viables, y la mayoría nos quedamos atrás.
Víctor Serna Vargas
El Prat de Llobregat