Soy pensionista de 74 años y mi esposa está enferma. La compañía de seguros de salud nos ha incrementado la póliza en un 12,47%, prácticamente lo mismo los cinco últimos años. La cuota actual es de 432,51 euros. Hemos sido socios durante más de 45 años, y si hablamos con la compañía, argumenta que los costes, más nuevos servicios, han aumentado y que nosotros hacemos más uso ahora por la edad. Nos brinda a que la dejemos, pues no somos rentables.
Sin embargo, somos esclavos de ella, puesto que la sanidad pública nos da una cobertura insuficiente, con demoras importantes. Durante años ahorramos cobertura asistencial a la Seguridad Social y a la sanidad pública, cuyos profesionales están agotados.
Propongo, a quien corresponda, un descuento en la declaración de la renta total o parcial que haga justicia, a partir de una edad.
Miguel Roy Ruiz
Suscriptor Barcelona