Las espectaculares cavernas de mármol de la Patagonia chilena
Naturaleza increíble
A orillas del lago General Carrera, en Chile, estas extraordinarias formaciones naturales se pueden visitar en excursiones en barco
Desde los objetivos datos geológicos/geográficos, podríamos decir que se trata de un conjunto de formaciones minerales de carbonato de calcio generadas durante miles de años por la erosión de las aguas del lago General Carrera -un lago binacional que en Argentina se llama Buenos Aires-, en la región de Aysén de la Patagonia chilena, unos 220 km al sur de la capital regional, Coyhaique.
Y también que las rocas erosionadas corresponden a mármoles originarios del paleozoico superior (unos 300 millones de años), aunque las cavernas, se estima, se formaron hace unos 15.000 años, luego del último período glacial. En ellas predomina el color blanco, aunque también se ven tonalidades azules y rosadas. Se estima que en la zona hay más de 5.000 millones de toneladas de mármol.
Estos datos, sin embargo, ni de casualidad logran describir la belleza del paisaje ni la impresión que causa al entrar -en lancha o en kayak- en estas extraordinarias formaciones que, en Chile, fueron declaradas ‘Santuario de la naturaleza’, y en las que el reflejo del sol genera una exhibición únicas.
La ‘Catedral’, ‘las Capillas’ y ‘las Cavernas’ de mármol, se encuentran sobre el sector del lago en que se unen el brazo noroeste (por el que llegan las ag
uas del río Murta) y el sudoeste (en el que se une con el pequeño lago Bertrand).
Los acantilados e islotes de mármol se visitan en dos sectores: el principal está sobre la Puntilla El Mármol, alrededor del cual se encuentran los principales islotes que dan origen a la ‘Catedral’ y la ‘Capilla’. El segundo sector, el de las ‘Cavernas’, está sobre la isla Panichini, cerca de Puerto Sánchez, y sus islotes cercanos.
Cómo visitarlas
El Buenos Aires/General Carrera es el segundo lago más grande de Sudamérica, y del lado chileno estaba bastante aislado hasta la década del 90, ya que el único acceso era desde Argentina, por el paso río Jeinemeni que une las localidades de Los Antiguos, en Santa Cruz, y Chile Chico. Pero en esa década se extendió hasta la zona la carretera austral chilena -una fantástica ruta escénica-, en 1994 el sector fue declarado monumento nacional con el rango de ‘Santuario de la naturaleza’, y pasó a convertirse en un importante atractivo turístico de la región de Aysén.
Para visitar las formaciones hay excursiones tanto desde Chile Chico como desde Los Antiguos, en embarcaciones que zarpan desde distintos puntos, dependiendo de las condiciones climáticas.
“Desde Los Antiguos hay excursiones todo el año, aunque la mejor época va de noviembre a abril. Partimos bien temprano por la ruta 265, que al atravesar Chile Chico se transforma por un tramo en un espectacular camino de cornisa por el borde sur del lago. Hay varios embarcaderos para iniciar la navegación dependiendo de las condiciones climáticas. Navegamos cerca de mediodía (hora y media en total), y al regresar almorzamos frente al lago. Hay muchas formaciones, y dependiendo del nivel del lago, podemos visitar unas o a otras”, comenta Federico Djeordjian, de la empresa Chelenco Tours , una de las que organiza la excursión desde Los Antiguos.
En el lado chileno, si uno va por cuenta propia, los principales embarcaderos son Puerto Río Tranquilo, Puerto Mármol y, al otro lado de la bahía Murta, Puerto Sánchez.
La visita dura en total 12 horas y cuesta unos seis euros por persona (menores de 12 años, 50%), con todo incluido (traslados, guía, almuerzo, snacks, navegación). “Es la excursión más demandada, junto con la de cueva de las Manos”, comenta Federico. Y agrega que el otoño es una excelente época para visitar la zona, por las tonalidades que adoptan los árboles: del amarillo de los álamos en Los Antiguos a los ocres y rojos de la lenga en el bosque de Zeballos y los ñires del lado chileno.