Escapadas rurales, opciones originales (e infinitas) para el próximo puente

Se aproxima un puente y son muchos los que están planeando aprovechar los cuatro días festivos para disfrutar de una escapada. Superadas las largas y cálidas jornadas veraniegas, otoño abre la puerta a infinitas posibilidades sin necesidad de cruzar la frontera, coger un avión o disponer de un presupuesto elevado. Es el mejor momento de optar por el turismo rural.

Un estudio elaborado por el buscador de hoteles Trivago descubre cuáles son les destinos rurales preferidos por los viajeros españoles y los precios medios de los alojamientos en cada provincia, que oscilan en el top ten entre los 71 euros de un alojamiento asturiano a los 106 euros de Girona. Te invitamos a descubrirlos.

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Asturias (71 euros)

Cangas de Onís, Ribadesella y los pueblos marineros de Luarca, Cudillero y Llanes son indudablemente los destinos rurales más populares de Asturias, una comunidad autónoma que tiene en la naturaleza su principal reclamo turístico.

El parque nacional de los Picos de Europa y los parques naturales de las Fuentes del Narcea, Redes o Somiedo hacen posible realizar múltiples actividades deportivas como la escalada al Naranjo de Bulnes, el senderismo en la ruta del Cares, el ciclismo de montaña o seguir la huella del oso y el lobo...

Cantabria (78 euros)

Las actividades al aire libre son también el punto fuerte de Cantabria, una zona en la que el turismo rural está muy consolidado. Cuenta con una amplia oferta de alojamientos, con un precio medio de 78 euros. La zona de Liébana es especialmente conocida por sus rutas de senderismo y ciclismo de montaña.

La comunidad tiene también una larga tradición termal -con siete balnearios- y cuevas prehistóricas, con pinturas rupestres como la de Altamira, atractivos cuyo renombre ha traspasado fronteras. Alojarse en una de las numerosas casas montañesas tradicionales restauradas añade un plus de encanto a la escapada.

Navarra (76 euros)

El Pirineo navarro puede presumir de ser pionero en turismo rural, circunstancia perceptible en su amplia e interesante oferta, cuyo precio medio se sitúa en los 76 euros. Los valles de Roncal, Salazar y Baztán son escenarios ideales para la práctica del senderismo, los deportes de aventura el BBT y la recolección de setas.

La zona cuenta con numerosos pueblos pintorescos, como Ochagavía, y caseríos reconvertidos en casas rurales que realizan actividades de agroturismo en los que los niños pueden disfrutar de lo lindo dando de comer a las ovejas o aprendiendo a ordeñar las vacas. Si te gusta la fotografía, piérdete por la Selva de Irati, uno de los mayores hayedos de Europa.

Huesca (81 euros)

Los valles de Benasque y Tena, en el Pirineo, son las zonas más buscadas por los turistas, y los pueblos de Aínsa, Boltaña y Torla -puerta de entrada al parque nacional de Ordesa y Monte Perdido-, los pueblos que despiertan mayor interés. Antes de la llegada de la nieve, se imponen deportes al aire libre como el barranquismo, el senderismo, la escalada, la bicicleta de montaña, el kayak o la espeleología.

La provincia cuenta también con un gran patrimonio artístico y cultural que tiene en Jaca -con su ciudadela- uno de los grandes exponentes. Canfranc, con la impresionante estación que esconde un enigmático pasado, o la arquitectura popular de casas solariegas, muchas reconvertidas en alojamientos rurales, son atractivos complementarios.

Girona ( 106 euros)

Una amplia red de espacios protegidos, un patrimonio natural y una biodiversidad incomparable caracterizan la provincia de Girona, convirtiéndola en una de las más atractivas para los aficionados al turismo rural. La Garrotxa ofrece múltiples opciones de ecoturismo y deportes de aventura: rutas de senderismo o BTT, vuelos en globo o paseos a caballo; bosques singulares como la Fadega d’en Jordà -fantástica para ser fotografiada en otoño- paisajes volcánicos, o poblaciones especiales como Castellfollit de la Roca, Santa Pau, Besalú o la capital, Olot.

El Empordà regala paisajes interiores y de costa increíbles en otoño, la Cerdanya hace lo propio en el Pirineo, mientras que en el Ripollès los aficionados al arte, y en especial al románico catalán, tienen una cita.

Ávila (73 euros)

Si te gusta contemplar los cielos estrellados, la Sierra de Gredos es el mejor escenario para hacerlo de Castilla y León, la comunidad autónoma con mayor concentración de alojamientos de turismo rural de España. Y es que el norte de Gredos, además de ser una zona ideal para disfrutar de rutas micológicas, paseos a caballo, alpinismo o excursionismo, ha sido reconocido con la certificación Starlight.

Podrás hospedarte en posadas reales, el alojamiento rural por excelencia de la comunidad, edificios históricos restaurados tales como molinos, casas de labranza o palacios, situados sobre todo en pequeñas localidades abulenses. El precio medio durante el último año se ha situado, según Trivago, en 73 euros.

Segovia (86 euros)

Patrimonio y naturaleza son los principales reclamos del turismo rural segoviano, con la Sierra de Guadarrama -al sur-, salpicada de pequeños pueblos de alto valor histórico, y el parque natural de las Hoces del Río Duratón -al nordeste-, con un valor ambiental y una oferta de actividades como senderismo, paseos acaballo o rutas en quad.

Las localidades más destacadas entre bosques y campiñas son Vegas de Matutel, Navafría, los Reales Sitios o El Espinar, donde hospedarse resulta toda una experiencia. El precio medio de un alojamiento se sitúa en los 86 euros la noche.

Cáceres (87 euros).

Las hosperías extremeñas, alojamientos ubicados en edificios singulares, se han convertido en un atractivo por sí mismas, ya que unen los conceptos de patrimonio, gastronomía y naturaleza. Podemos encontrarlas sobre todo en el parque nacional de Monfragüe o en las Hurdes, en la provincia de Cáceres, y pasar una noche en una de ellas cuesta de media 87 euros.

Recolección de setas, barranquismo o kayak son algunas de las actividades ideales para practicar en plena naturaleza, en los valles del Jerte y Ambroz o en la comarca de La Vera, donde, además, encontrarás espectaculares gargantas y piscinas naturales como las de la reserva natural Garganta de los Infiernos.

Castellón (84 euros)

¿Te suena Morella? Considerada uno de los pueblos más bonitos de España, esta localidad, famosa por su castillo y sus murallas, se ha convertido en uno de los reclamos turísticos más destacados de la comarca castellonense de Els Ports. Y es que la zona esconde localidades que todavía conservan tradiciones y construcciones de antaño.

Los balnearios, como el de l’Avellà y el de Benassal, situados en un entorno rural; el arte rupestre, con ejemplos como la cueva de La Valltorta; la naturaleza, que permite la práctica de deportes de aventura, o numerosos pequeños pueblecitos invitan a visitar y alojarse -por una media de 84 euros la noche- en el entrono rural de otra comarca, la del Maestrazgo.

Granada (91 euros)

Hablar de turismo rural en Granada es hablar de la Alpujarra, situada en las faldas de Sierra Nevada, una comarca en la que historia, tradición y naturaleza la han convertido en un destino de primer orden.

Capileira, con el Barranco de Poqueira; Bubión, con sus propuestas de turismo activo, con rutas a caballo, a pie o en 4x4, o Lanjarón, la ciudad-balneario famosa por sus aguas medicinales son solo algunas de las propuestas para visitar la zona y alojarte en una pequeña aldea o en algún cortijo. El precio medio por noche es de 91 euros.