Cuando se habla de la final de la Super Bowl no solo se hace referencia a un evento deportivo sino a uno de los mayores espectáculos televisados que hay en el mundo. Y es que más allá de la final de la NFL donde dos equipos batallan por llevarse el anillo que hay en juego, la música tiene un gran peso en diversas partes del partido. Una de ellas es el show previo que este año protagonizó Miley Cyrus, quien se emocionó al cantar Wrecking Ball y acabó llorando en el escenario.
Lo cierto es que todas las miradas estaban posadas sobre The Weeknd ya que iba a ser el responsable del show del medio tiempo, la parte más llamativa del evento fuera del ámbito deportivo. Y por las reacciones que ha habido en redes, parece que los espectadores quedaron decepcionados con su puesta en escena y la falta de artistas invitados.
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Y es que, a pesar de que se había desmentido, muchos seguían creyendo que Rosalía haría acto de presencia en el escenario para interpretar el remix de Blinding Lights junto a The Weeknd. La catalana se convirtió, sin pretenderlo, en otra de las protagonistas de la Super Bowl sin tan siquiera estar presente.
Pero quien sí estuvo presente en cuerpo y voz fue Miley Cyrus. La artista se encargó de animar al público en el espectáculo previo a la gran final que enfrentaba a los Chiefs de Tampa contra los Bucaneers de Kansas City.
Miley Cyrus
Miley Cyrus ofreció un show como solo ella sabe y se acompañó de Billy Idol para interpretar a dúo Night Crawling. Con un espíritu ochentero tanto en el look como en lo musical, el mismo del que hace gala en su último disco Plastic Hearts, Miley Cyrus dejó al público boquiabierto y hasta eclipsó al que debía ser el protagonista de la noche, The Weeknd.
Y es que Miley Cyrus sabe perfectamente cómo seducir al público. No en vano, lleva desde niña dedicándose al mundo del espectáculo. En esta ocasión, no obstante, la emoción pudo con la joven de 28 años y acabó llorando sobre el escenario.
Fue durante la interpretación de su mayor éxito como solista, Wrecking Ball, una canción que marcó un antes y un después en su carrera tras dejar atrás al personaje de Hannah Montana que le dio la fama mundial.
En las imágenes del show previo a la Super Bowl se puede ver a Miley Cyrus subida en una estructura colocada en el escenario y sacar chorro de voz para interpretar este hit de 2013. Pero al llegar a la parte final, justo antes de finalizar, se la oye sollozar mientras oculta la cara para que no se pueda percibir que está llorando de la emoción. La actuación de Miley fue aplaudida tanto por el público que estaba presente como por los espectadores que lo siguieron desde casa.