Menudo susto se llevaron los asistentes al concierto de Bad Bunny en Milwaukee el pasado 29 de septiembre, pero mayor fue el susto que se llevó él. El cantante de trap, que llevaba varios días encontrándose mal, vivió un difícil momento en el escenario cuando tuvo que tumbarse en el suelo por los fuertes dolores. Al ver que no se mejoraba, acabó cancelando el show y tuvo que ser trasladado a un hospital.
Todo el que haya presenciado o visto un concierto de Bad Bunny sabe que el espectáculo del cantante suele estar acompañado de mucha energía y movimiento. Y es que cuando está actuando, Bad Bunny no para quieto.
Sin embargo, su último concierto fue muy diferente. Hace una semana, Bad Bunny hacía parada en Milwaukee, Estados Unidos, con su gira ‘La Nueva Religión’ que, tras arrasar en Europa, recorre ahora parte del continente americano. El show parecía ir totalmente bien al principio, pero de repente las cosas se torcieron.
El puertorriqueño empezó a encontrarse mal hasta tal punto que, sin fuerzas, se tumbó en el suelo del escenario intentando que se le pasaran los dolores que estaba teniendo mientras seguía cantando. Bad Bunny tenía la intención de continuar con el concierto, pero no pudo hacerlo y se vio obligado a suspenderlo y acudir al hospital más cercano.
Poco después, el cantante utilizó su perfil de Instagram para explicar lo ocurrido y tranquilizar a sus fans: “Sentía un dolor muy fuerte y raro a la vez. En la parte final del show mi cuerpo casi no resistía más, tanto así que me senté y ¡hasta me acosté buscando alivio!”. También compartió una imagen en la que se le veía tumbado en una camilla con varios cables en el cuerpo mientras le hacían pruebas.
Aunque en principio parece que no se trata de ningún problema grave, Bad Bunny y su equipo han decidido suspender temporalmente su gira para descansar y centrarse en su recuperación: “El que me conoce y me ha visto en vivo sabe que lo doy todo. Y ese día no fue la excepción, di todo lo que pude dar, tanto que no me quedó más para los demás días”.