El parabrisas del futuro será una gran pantalla multimedia
Podremos ver contenidos a la carta mientras circulamos
En una soleada mañana de julio de 2025, Luis se acomoda en el asiento delantero de su coche. “Arranque”, murmura, y su coche eléctrico cobra vida cuando capta su voz. Automáticamente, las avanzadas células fotovoltaicas comienzan a absorber los rayos solares, mientras que el cristal de las ventanillas traseras se oscurece para evitar el deslumbramiento y mantener fresco el interior.
Las pantallas de realidad aumentada aparecen en el parabrisas. El coche se comunica en línea con cientos de vehículos y recibe información a través de la nube. Al decir el destino, aparecen flechas de indicación proyectadas en el vidrio.
Tecnologías como la opacidad variable, realidad aumentada y gráficos 3D nos permitirán ver contenidos a la carta
Esta puede ser la rutina de cada mañana de cualquier usuario de automóvil dentro de 5 años. El mundo ha sufrido una transformación digital en las dos últimas décadas. La mayoría de las personas vive y trabaja conectada. El mundo digital forma parte de nuestras vidas y la industria del automóvil acabará ofreciendo vehículos con la misma tecnología intuitiva y conectividad que un smartphone.
A esta tendencia se une el avance de la conducción automatizada, que progresivamente irá descargando al conductor de la función de conducir y le permitirá centrar su atención en otras cosas mientras circula en su coche. Y van a ser muchas horas para consumir contenidos, teletrabajar, chatear o realizar otras tareas.
Algunas teorías apuntan a que el automóvil se va a convertir en un ecosistema de atención, donde el parabrisas será la gran pantalla y su centro de mando y entretenimiento. “El modelo de negocio de la industria del automóvil va a cambiar por completo y el parabrisas va a convertirse en la parte más importante de un coche”, asegura Christoph Keese, vicepresidente de Axel Springer.
Para Bernard Jullien, Director de Gerpisa, una red internacional e interdisciplinaria de científicos sociales que trabajan en la industria del automóvil, “estas pantallas inteligentes en el parabrisas serán capaces de hacer de todo, desde calcular la velocidad, a ofrecer realidad aumentada o controlar los sistemas de entretenimiento”.
Algunas teorías apuntan a que el automóvil se va a convertir en un ecosistema de atención, donde el parabrisas será la gran pantalla
La Dra. Gwen Daniel, de Belron Technical, señala que el parabrisas no es el único cristal de un coche que podría convertirse en una pantalla funcional: “Hemos visto investigaciones de ventanillas laterales traseras como pantallas de información y entretenimiento. Podría ser como en la película Minority Report, donde la gente hace todo tipo de cosas con el vidrio”.
Los parabrisas inteligentes se convertirán así en zonas de entretenimiento y comunicación a medida que los coches se vayan haciendo cada vez más autónomos. Liberados de la necesidad de concentrarse en la carretera, los automovilistas podrán sentarse y relajarse cuando viajen en un automóvil.
Apple ya ha presentado patentes en las que se especifica la posibilidad de realizar llamadas a través de FaceTime entre dos coches autónomos y los expertos del sector predicen una próxima revolución en el diseño de la cabina de un coche. “En un coche que se conduce solo, al principio a velocidades bajas en ciertas autopistas o en tráfico muy congestionado, el conductor podría hacer varias cosas usando el parabrisas”, dice Emilio Brambilla, Editor Jefe Adjunto de Quatrroroute.
“Y con un coche autónomo el conductor no necesitará ninguna información sobre lo que ocurre en el exterior”, asegura Hans Roth, Director de Desarrollo de Negocios de Harman. “El parabrisas se convertirá en una superficie de visualización, un cine virtual en movimiento”, añade.
Diferentes tecnologías en desarrollo
En el camino hacia el coche autónomo, los nuevos parabrisas tendrán que tener una opacidad variable, para ser completamente traslúcido cuando haya que conducir o se quiera ver el paisaje, completamente opaco cuando se quiera ver una película, y con diferentes grados de transparencia para poder lanzar pantallas de información, o elementos de realidad aumentada, que se relacionen con la realidad que se ve a través del parabrisas.
Otra línea de desarrollo son los gráficos en tres dimensiones proyectados en el parabrisas, que van a ayudarnos a gestionar mejor la atención mientras vamos conduciendo. Los sistemas de visualización en tres dimensiones permiten estructurar mejor la información y facilitan la comprensión de los elementos espaciales.
Se ha demostrado que esta tecnología acelera la reacción del conductor y mejora los juicios de profundidad. Y en un coche completamente autónomo, las pantallas 3D ofrecerán nuevas experiencias de inmersión con juegos y películas; así como para la interacción con otras personas.
Según informa la firma Carglass, especialista en parabrisas, las marcas de automóviles y los fabricantes de pantallas también están trabajando en parabrisas que permiten integrar elementos digitales que complementan la realidad que vemos a través de nuestros ojos. Esta realidad aumentada permite desplegar delante de los ojos del conductor todo un mundo de señales, alertas e indicaciones de forma natural.