Este fin de semana, es momento de cambiar la hora para adaptarnos al horario de invierno. En la madrugada del domingo 27 de octubre, tendremos que atrasar los relojes una hora, pasando de las 3.00 h a las 2.00 h., con lo que disfrutaremos de 60 minutos más de descanso. Este cambio horario, no obstante, conlleva que los días sean más cortos y las noches más largas, con lo que es fundamental extremar la precaución al volante, ya que las horas de oscuridad suelen estar asociadas a aumento de los accidentes de tráfico.
De acuerdo con datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), durante el año 2023 el 35% de los fallecidos en siniestros viales se produjeron en horas de poca luz, entre 8 de la noche y las 7 de la mañana, lo que evidencia la relación que existe entre las condiciones de visibilidad en carretera y la seguridad vial.
Una vía rápida iluminada por farolas coladas en la mediana
En este contexto, el alumbrado se convierte en uno de los elementos de seguridad activa más importante que equipan los vehículos, ya que una correcta visibilidad no solo mejora la percepción de los obstáculos en la carretera, sino que también ayuda a otros conductores y peatones a identificar la presencia del vehículo.
De este modo, se reduce significativamente el riesgo de accidentes y se contribuye a una circulación más segura, especialmente en condiciones de escasa visibilidad.
Más de un tercio de las muertes en carretera en 2023 se produjeron entre las 8 de la noche y las 7 de la mañana
Aun así, muchos automovilistas parecen no ser conscientes del peligro que supone conducir con las luces en mal estado, ya que el 23% de los vehículos que acudieron a las estaciones de ITV el último año presentaban fallos en el sistema de alumbrado y señalización, según datos facilitados por el Ministerio de Industria y Turismo.
Además de los riesgos inherentes a la seguridad vial, no utilizar correctamente las luces puede acarrear sanciones económicas. La normativa de tráfico establece que la falta de visibilidad, ya sea por no encender las luces en condiciones adecuadas o por llevarlas en mal estado, puede dar lugar a multas que oscilan entre 80 y 200 euros, dependiendo de la gravedad de la infracción, como vamos a ver a continuación.
En condiciones de visibilidad reducida es obligatorio circular con las luces de cruce encendidas
Luces de cruce
El Reglamento General de Circulación establece que se deben encender las luces de cruce entre la puesta y la salida de sol, así como al circular por un túnel o un carril reversible o cuando existan condiciones meteorológicas o ambientales que disminuyan la visibilidad. No usar las luces de cruce correctamente supone una sanción de 200 euros.
Hacer ráfagas
Si bien se permite un uso moderado de las ráfagas para advertir sobre un peligro, como un adelantamiento inapropiado, llevar a cabo ráfagas de manera continua, sin importar la razón, puede provocar deslumbramientos y aumentar el riesgo de accidentes. Por lo tanto, se clasifica como una infracción leve castigada con 80 euros.
El alumbrado de un vehículo es tan importante para ver los obstáculos en la carretera como para ser vistos por otros conductores
Luz fundida
Tener una luz fundida puede acarrear una multa de hasta 200 euros. Si te encuentras en esta situación mientras conduces, tienes tres alternativas: puedes llamar a una grúa para que lleve el coche directamente al taller, reemplazar la bombilla tú mismo o contactar con tu seguro para solicitar asistencia en carretera, quienes se encargarán de proporcionarte una nueva bombilla y realizar la instalación.
Circular con una luz fundida cuando es obligatorio llevar el alumbrado acarrea una multa
Es importante recordar que, aunque desde 2010 ya no es obligatorio contar con una luz de repuesto en el vehículo, sigue siendo ilegal conducir con alguna de las luces apagadas. En este apartado se incluye la luz de la matrícula.
Intermitentes
No indicar las maniobras con el uso del intermitente sigue siendo una de las infracciones más comunes entre los conductores y, aunque rara vez se sanciona, puede resultar en una multa de hasta 200 euros. Se debe usar el intermitente para comunicar las intenciones de cambio de dirección o de carril; no hacerlo puede generar confusión en otros usuarios de la vía, aumentando el riesgo de accidentes.
Faros antiniebla
Las luces antiniebla solo se deben utilizar en condiciones climatológicas adversas que dificultan la visibildad
El uso indebido de los faros antiniebla puede acarrear una multa de 200 euros. Estos faros deben activarse únicamente en situaciones de lluvia intensa que impidan una buena visibilidad o en condiciones de niebla. Es fundamental abstenerse de encender tanto los focos delanteros como los traseros en circunstancias en las que las condiciones meteorológicas no lo justifiquen, ya que hacerlo podría deslumbrar a otros conductores y crear un peligro adicional.
Repostar con las luces encendidas
Como en el apartado anterior, el uso inadecuado de las luces al repostar puede dar lugar a una multa de 200 euros. La normativa establece que para cargar combustible en el depósito de un vehículo éste debe hallarse con el motor parado y las luces apagadas.
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Inmovilizar el vehículo sin usar las luces
Según el artículo 105 del Reglamento General de Circulación, inmovilizar un vehículo sin tener encendidas las luces de posición puede resultar en una multa de 200 euros. La falta de visibilidad de un vehículo detenido entre la puesta y la salida del sol puede provocar accidentes, ya que otros conductores pueden no identificar la presencia del automóvil.