Siete distracciones al volante totalmente evitables
La desatención en la conducción incrementa el riesgo de sufrir un accidente
Las distracciones son una de las mayores causas de siniestralidad en las carreteras. Acciones aparentemente inofensivas, como sintonizar la radio o coger las gafas de sol de la guantera, pueden resultar letales si las realizamos mientras conducimos. Cuando estamos al volante debemos mantener todos los sentidos en alerta, sin desviar la vista de la vía, puesto que cualquier pequeña desatención tiene el riesgo de acabar en un accidente de consecuencias inciertas.
Según la Dirección General de Tráfico (DGT), uno de cada cuatro automovilistas asegura haber sufrido o estado a punto de sufrir un accidente por una distracción. Y todas ellas son evitables. A continuación, os explicamos algunas de las más frecuentes y que deben de abandonarse a toda costa.
1. Llamar por teléfono
Marcar un número de teléfono nos distrae durante 13 segundos. Esto supone que si circulamos a 100 km/h, el vehículo recorrerá 361 metros sin que nuestra atención esté en la carretera. Lo mejor es realizar las llamadas antes o después del trayecto o durante alguna parada. Según la DGT, utilizar el móvil multiplica entre cuatro y nueve veces el riesgo de accidente, como si tuviéramos en sangre 1,0 g/litro de alcohol, y duplica el tiempo normal de reacción.
2. Enviar un whatsapp
Antes hacíamos referencia al tiempo que se tarda en marcar un número de teléfono y el tramo que se recorre en esos segundos. Pues bien, esas cifras aumentan considerablemente cuando nos referimos al envío de un whatsapp. Por muy hábil que uno sea con los dedos para escribir, destinará unos 20 segundos en completar la redacción de un mensaje, y eso supone que el coche recorrerá más de 550 metros a 100 km/h, y 166 si va a tan solo 30 km/h. Se calcula que el riesgo de sufrir un accidente mientras se manda el whatsapp se multiplica por veintitrés.
3. Utilizar el navegador
Otra acción que distrae al volante es la de introducir un destino en el navegador o en alguna de las aplicaciones del móvil. La DGT asegura que configurar una dirección conlleva al menos 15 segundos, lo que significa que si el coche que viaja a 90 km/h, recorrerá nada menos que 375 metros sin que el conductor esté totalmente pendiente del tráfico. Es imprescindible determinar el destino antes de iniciar la marcha. Asimismo, hay que tener mucho cuidado con manejar la radio o cualquier otro dispositivo del vehículo.
4. Regular los retrovisores
También es necesario colocarse bien los retrovisores -tanto el interior como los exteriores- antes de comenzar el trayecto, cuando estamos detenidos. No será necesario si somos el único conductor del vehículo, puesto que ya estarán regulados a nuestras necesidades. No así cuando nos sentamos por primera vez en un coche que no hemos llevado antes, por ejemplo, uno de alquiler, o en uno que compartimos con otra persona.
5. Comer o beber
A diferencia de otras distracciones que sí están prohibidas específicamente en el Reglamento de circulación, como utilizar el móvil o el GPS, comer o beber no lo están explícitamente. Sin embargo, pueden conllevar una multa si el agente considera que esta acción nos ha impedido mantener la libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción.
6. Fumar
Lo mismo sucede con fumar, que sin estar prohibido en la normativa puede comportar una sanción. La DGT asegura que encender un cigarrillo puede llevar unos 4 segundos, que pueden distraer de lo que sucede en la carretera durante 130 metros si se circula a 120 km/h y unos 100 metros si se va a 90. Además, multiplica por 8 el riesgo de accidente. No hay que olvidar el riesgo de incendio existente si arroja la colilla por la ventanilla (multado con 200 euros y pérdida de 4 puntos en el permiso).
7. Buscar objetos
Nunca hay que buscar objetos en el habitáculo mientras se conduce, puesto que no solo desviamos la vista de la carretera sino que también podemos modificar la trayectoria del vehículo. Es habitual que mientras mantenemos una mano en el volante utilicemos la otra para abrir la guantera o mirar en el bolso y esto nos lleve a mover involuntariamente el volante.