Imagen y rendimiento
Equipa control de descenso, control de estabilidad antibalanceo, arranque en pendientes, etcétera
El pick-up Ford Ranger es el modelo de su segmento más vendido en los mercados europeos. La firma americana potencia su gama con el lanzamiento de la versión más resistente y de mayor rendimiento, que recibe el nombre de Ranger Raptor.
Esta versión Raptor del Ranger muestra una imponente presencia. Equipa una parrilla inspirada en el F-150 Raptor, los faros cuentan con xenón de alta intensidad y el paragolpes delantero incluye nuevos faros antiniebla led con conductos funcionales de cortina que mejoran el flujo de
aire alrededor del chasis. También son específicos los guardabarros delanteros para permitir mayor recorrido de suspensión y utilización de neumáticos de gran tamaño.
El paragolpes trasero tiene una barra de remolque integrada con capacidad para 2,5 t. Equipa también dos ganchos delanteros de remolque, capaces de desplazar hasta 4.635 kg, y otros dos traseros, con capacidad de 3.863 kg. El portón trasero tiene un asistente de elevación.
En el interior exhibe acabados de calidad y materiales resistentes. Los reforzados asientos mejoran el agarre y cuentan con costuras azules y detalles en cuero.
El Raptor equipa un motor biturbo diésel 2.0, de 213 CV y 500 Nm de par, y está asociado a una caja automática de 10 velocidades. Esta mecánica se combina con un chasis reforzado que utiliza aceros de alta resistencia y baja aleación para soportar los más duros castigos.
Los nuevos amortiguadores actúan con mayor eficacia en los extremos para potenciar la capacidad todoterreno y, a su vez, ofrecen más suavidad en carretera. Este pick-up cuenta con un nuevo sistema de suspensión trasera en espiral. Equipa un brazo integrado que permite los movimientos verticales del eje, sin apenas derivaciones laterales. La frenada está confiada a pinzas de dos pistones, aumentando el diámetro del pistón hasta 332 mm. Los neumáticos BF Goodrich 285/70R17 ofrecen un diseño de flanco resistente y un agresivo dibujo de la banda de rodadura.
Los seis modos de conducción permiten ajustar la respuesta del vehículo a cada tipo de superficie
Dispone de un sistema de gestión del terreno con seis modos de conducción. El modo normal potencia el confort, consumo y facilidad de conducción. El deportivo se muestra más sensible para conducir en asfalto. El modo hierba/grava/nieve aumenta la seguridad en suelos sin adherencia. El modo barro/arena ofrece tracción óptima, y el modo roca permite avanzar a baja velocidad. Finalmente, el modo baja potencia el rendimiento a altas velocidades fuera de carretera.