Este pasado lunes 2 de diciembre, el Royal Albert Hall de Londres acogía la entrega de los Fashion Awards. Estos galardones, conocidos popularmente como los ‘Oscar británicos de la moda’, fueron creados en 1989 para promocionar el talento de diseñadores, marcas y empresas de la industria de la moda.
JW Anderson, director creativo de Loewe, se alzaba con el premio a Mejor Diseñador del Año en esta edición que reconocía también el trabajo de Tom Ford, Simone Rocha o Grace Wales Bonner.
El evento reunía a un buen número de celebridades, entre ellas, Rihanna, que protagonizaba el look más extravagante de la noche. La artista de Barbados llegaba a la alfombra roja de la mano de su pareja A$AP Rocky, padre de sus dos hijos, y con un estilismo con el que recuperaba la polémica moda de dejarse los pantalones en casa.
La intérprete de Diamonds apostaba por un conjunto de la colección otoño-invierno 2022 de Christian Lacroix que destacaba por su tejido de pelo. En concreto, lució un abrigo de pelo azul con un voluminoso sombrero a juego y un body negro con escote corazón que incorporaba una especie de mini cola con brillos.
Un peculiar estilismo que completaba con medias y guantes largos, ambos en color negro, y unos salones destalonados con tiras y detalle joya en el empeine. También optaba por tres collares de diamantes y un recogido desenfadado, con mechones sueltos con ondas.
Los premios también contaban con la presencia de Alexa Chung, la it girl británica por excelencia, que posaba con un abrigo de pelo marrón y un vestido negro con transparencias y lentejuelas.
Ashley Graham también elegía el negro con un vestido de tul con escote recto y finos tirantes que jugaba con las transparencias.
Alessandra Ambrosio estaba radiante con un vestido de Self-Portrait con aberturas, lentejuelas y encaje.
Lila Moss, hija de Kate Moss, se decantó por un conjunto vintage de Alexander McQueen, con un top encorsetado y pantalón negro con bordados. Estas dos piezas pertenecían al armario de su famosa madre, una de las top models británicas más influyentes.
Nicola Coughlan se atrevió con un voluminoso diseño de Gaurav Cupta, con un vestido negro con escote bardot satinado y sobrefalda en color malva.