El experto en nutrición y psiconeuroinmunología Xevi Verdaguer ha explicado en un reciente vídeo cómo una correcta hidratación nocturna puede ser clave para mejorar la calidad del sueño y evitar despertares indeseados durante la madrugada.
Según detalla, muchas personas no llegan correctamente hidratadas a la hora de acostarse, lo que provoca un efecto hormonal que interfiere directamente con el descanso.
La pérdida de agua durante el sueño pues tener consecuencias
La deshidratación nocturna, un problema común
“Cuanto más deshidratado estás al final de la noche, porque respiras y transpiras, por lo tanto vas perdiendo agua, y no bebes, todo el mundo termina deshidratado”, advierte. Esta pérdida de agua natural durante el sueño puede tener consecuencias inesperadas: “Si tú, desde la cena hasta antes de acostarte, no llegas bien hidratado, las hormonas del estrés, como el cortisol, subirán antes de lo normal y despertarás antes de que suene el despertador”.
Verdaguer se refiere a una situación que muchas personas experimentan: despertarse en mitad de la noche para ir al baño o con la necesidad urgente de beber agua. “Si tu cerebro te da sensación de sed cuando te levantas a mear por la noche, es seguro que estás deshidratado”, afirma.
El aumento del cortisol como respuesta a la deshidratación interrumpe el ciclo natural del sueño, generando despertares que, aunque breves, pueden afectar al descanso de cada uno. Por eso, el especialista insiste en la importancia de ingerir alimentos ricos en agua durante la cena. “Las frutas, las verduras y las legumbres es lo que más hidrata”, señala, recomendando incluir estos grupos en la última comida del día para asegurar una hidratación adecuada antes de dormir.
Así pues, Verdaguer propone una medida simple pero efectivo para cuidar del descanso: cenar alimentos hidratantes y prestar atención a las señales del cuerpo, especialmente a la sed nocturna, que suele ser un claro indicador de un desequilibrio en nuestro organismo.