Vox no es tan fiero como lo pintan. Al menos en Les Corts Valencianes. El grupo parlamentario que lidera José María Llanos ha renunciado a su enmienda al plan simplifica que reclamaba prohibir la construcción de hoteles a menos de 500 metros de la costa. La formación ultra cuestionaba la propuesta de los populares (que rebajaban a 100 metros la distancia) y reclamaban más metros respecto a la línea de costa. Sin embargo, este martes, en la Comisión de Justicia de Les Corts Valencianes, Vox y PP han llegado a un acuerdo esperado para dejar la distancia en 200 metros “medidos desde la primera línea de tierra no bañada por el mar”.
Una distancia, que tal y como explicó este periódico, además queda matizada. El PP quería que pudiera haber excepciones en aquellos lugares donde ya existiera edificaciones o infraestructuras y así ha sido. La transaccional firmada por los portavoces adjuntos de los populares Laura Chulià y de Vox David Muñoz, establece que a la norma de los 200 metros “se le aplicará una excepción cuando debido a barreras naturales o artificiales, como vías de transporte, se rompa la interacción entre el mar y las actividades humanas”.
En todo caso, matiza el acuerdo alcanzado, tanto a la norma general como a la excepción se le aplicarán tres limitaciones: “Se controlará la densidad de la edificación, no se podrán añadir un indeseado efecto de verticalidad que irrumpa en el paisaje y deberán contar con integración paisajística”.
Un acuerdo que no ha gustado a la oposición. La diputada socialista María José Salvador, impulsora del Plan de Acción Territorial de la Infraestructura Verde del Litoral (PATIVEL) durante su época de consellera, ha señalado en X que el acuerdo evidencia que el tira y afloja entre PP y Vox era un “teatro” y que el final de la representación supone “un día negro” para el territorio y el litoral valenciano.