Los jóvenes ocupantes de Premià acumulan más de veinte antecedentes por robos violentos
Sucesos
Una manifestación de apoyo a los detenidos clama contra las acusaciones de racismo y xenofobia
Los cuatro jóvenes que el domingo fueron atacados por decenas de personas en el piso que ocupan en Premià de Mar (Maresme) acumulan más de una veintena de delitos. La mayoría de los actos protagonizados por estos jovénes extutelados de origen magrebí de 25 años son robos violentos en los que las víctimas eran personas de avanzada edad.
Los Mossos están ahora a la espera de que, con el desalojo de la vivienda atacada, el barrio donde se produjeron los incidentes vuelva a la normalidad. La policía mantiene las acusaciones contra dos individuos que fueron detenidos en la algarada, entre ellas la de odio y racismo.
Una manifestación en apoyo de los dos detenidos congregó el martes a un centenar de personas. La mayoría reaccionaba indignada a las acusaciones de racismo “por haber defendido a nuestros padres” y prueba de que no se trató de una acción xenófoba fue el hecho que uno de los detenidos fuera un joven subsahariano que participó en las protestas.
En la misma comarca del Maresme, en Mataró, los Mossos se han visto obligados a incrementar el número de efectivos policiales ante el aumento de delitos. Una de las últimas muestras de esta situación es la detención de dos hombres de nacionalidad marroquí de 41 y 23 años que asaltaron una peluquería. El viernes entró en prisión otro joven de 19 años que había asaltado a un anciano para robarle una cadena de oro.
En cuanto al menor de 15 años que había amenazado de muerte al propietario de un bar, ingresó en un centro de internamiento de la Generalitat, y a su compañero, de 19 años, el juez le impuso una orden de alejamiento del establecimiento.