Tres jóvenes arquitectos de Madrid remodelarán un palacio en Cantabria al imponerse ante 21 proyectos
Arquitectura
Víctor Blanco, Beatriz Salido y Lucía Santos han ganado el concurso del programa Arte Público de la Fundación EDP
Tres jóvenes licenciados en Arquitectura por la Universidad Politécnica de Madrid y con máster en la Universidad de Sevilla, Vícto Blanco, Beatriz Salido y Lucía Santos, se han impuesto ante más de 20 proyectos y más de 50 estudiantes en el concurso Arte Público, que convocó la Fundación EDP en Cantabria para remodelar la Casona- Palacio de los Bustillo en el municipio de Puente Viesgo, que cuenta con 2.912 habitantes.
Estos tres jóvenes madrileños acabaron la carrera el verano de 2023 y han fundado el estudio de arquitectura Pico Tres Estudio. “Vimos que presentarnos a este concurso era una gran oportunidad porque se limitaba a estudiantes de último año de carrera o recién licenciados y no surgen muchas oportunidades así”, explica Lucía Santos a La Vanguardia en una entrevista telefónica, que aclara que “normalmente piden solvencia técnica y económica”. A su juicio, “no era un simple concurso de ideas porque el ganador iba a dirigir la obra”.
Ejecutarán la obra con hormigón cíclopeo
Además de los 10.000 euros que se han llevado del primer premio, estos tres jóvenes tendrán que ejecutar la obra en el 2025. “Vamos a reunirnos con miembros del Ayuntamiento del municipio cántabro para ver calendario, plazos de ejecución de obra, presupuesto...”
Su proyecto “Erre de Muro”se basó en una encuesta que había realizado el consistorio sobre si había que retirar el muro adjunto al palacio. Además de remodelar el palacio que en estos momentos no se encuentra apto para ser utilizado, hay que edificar alado un espacio de galería y auditorio. “Ante el dilema de los vecinos y la disparidad de opiniones, nuestra propuesta pasa por tirar el muro, pero usar los escombros para levantar el edificio nuevo”, explica Santos. Para ello - dice- “hemos propuesto utilizar un hormigón cíclopeo, que en el interior no utiliza la grava habitual, sino permite usar una piedra de mayor tamaño, que será la que se va a utilizar del muro perimetral retirada”.
“Nuestro proyecto, explica la arquitecta, se basa en la sostenibilidad”. De ahí que “de la cubierta inclinada se recogerá la lluvia y se canalizará hasta un depósito para regar el jardín del futuro inmueble renovado; también está previsto instalar 80 placas solares para abastecer al complejo de electricidad y, por último, será un edificio sostenible en el sentido de que se va a reutilizar parte de los escombros del muro perimetral para que quede en la memoria, pero en la práctica supone también gastar menos dinero en material nuevo”, sentencia Lucía Santos.