A juicio una banda de moteros de Lleida que viajó a Madrid para pelearse con un grupo rival
Pelea de bandas
Emplearon barras de hierro, defensas extensibles y puños americanos para perpetuar el ataque contra aquellos miembros que dejaron la banda
Una banda de moteros de Lleida se enfrenta esta semana a un juicio en la Audiencia Provincial de Madrid por atacar a un grupo rival que se había escindido por discrepancias ideológicas. La Fiscalía de Madrid pide entre siete años y medio y cinco años y medio de prisión para los ocho miembros del grupo de moteros ultra Rebels que en 2015 se desplazaron hasta la ciudad de Madrid con barras de hierro, defensas extensibles y puños americanos para perpetrar el ataque.
El Ministerio público acusa a los ocho miembros de Rebels de robo con violencia, intimidación y uso de medios peligrosos y pertenencia a grupo criminal. El presidente nacional de Rebels, Joan E.E. y Juan E.E. son acusados además de delitos de lesiones, por los que se enfrentan a las peticiones más altas de prisión. Todos los acusados son o eran miembros de los “capítulos” de Rebels en Lleida y Barcelona, según la acusación de Fiscalía,
Ocho acusados
Fiscalía pide siete años y medio de prisión
La escición de la banda tuvo lugar el año 2015, cuando seis de los integrantes del mismo grupo motero en Alcalá de Henares decidieron abandonarlo y crear el suyo propio “sin las connotaciones ideológicas” de Rebels, denominándolo Dragons and Gallopers.
Este nuevo grupo fijó su sede en el mismo local de Alcalá que usaban como miembros de los Rebels, aunque la banda no aceptó la escisión. En el acta de una de sus reuniones recogió consignas como “Dragos tiene que desaparecer sí o sí” y envió una nota informativa a sus miembros dejando claro que eran personas non gratas y que se reservaban el derecho a restablecer su honor y dignidad.
Restablecer su honor y dignidad
De Lleida a Alcalá para irrumpir en una fiesta
Según el relato del Ministerio Público, guiados por esa animadversión, los acusados, junto a siete individuos no identificados, decidieron ir desde Lleida a Alcalá para dar un escarmiento a los miembros de Dragons and Gallopers, que el 10 de julio de 2015 celebraba una fiesta en los locales del club.
Una vez allí, irrumpieron en el local sobre las 22.30 horas, algunos encapuchados, al grito de “al suelo, os vamos a matar, dadnos los chalecos” y llevando barras de hierro, defensas extensibles y puños americanos. Por todo ello, la Fiscalía les acusa de agredir a varios de los presentes, golpeándoles en la cabeza con las barras, de dañar varias motos y de robar chalecos de los Dragons.