El auge del mercado francés convierte Roses en la ciudad de Girona donde es más cara la vivienda

Mercado inmobiliario

Casi un 28% de las operaciones de compraventa realizadas en la provincia tienen como protagonistas a extranjeros

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Roses ha superado Girona y Palamós como la ciudad donde la obra nueva es más cara.

Pere Duran/Nord Media/Archivo

La reactivación del mercado francés tras la pandemia ha convertido Roses en la ciudad de la provincia de Girona donde actualmente es más caro comprarse una vivienda de obra nueva. El precio en las zonas más buscadas, en primera línea de costa, se enfila hasta los 4.963 euros el metro cuadrado, cifra que supone un encarecimiento de un 30% en solo un año.

Roses toma así el relevo a las ciudades de Girona y Palamós que en los últimos años habían ocupado el ranking de las once principales ciudades de la provincia donde la obra nueva en zonas premium y de nivel medio era más caro. 

Crece la compraventa a extranjeros

Tras la pandemia se han reactivado las operaciones de compraventa por parte de los extranjeros que representan ya un 27'7% del total

El último estudio de precios de mercado de obra nueva, segunda mano y alquiler que han presentado elaborado por el Col·legi i Associació d'Agents de la Propietat Inmobiliaria (API), el Gremi de Promotors i Constructors d'Edificis de Girona y el Col·legi d'Administradors de Finques de Girona, refleja un cambio de tendencia.

La "culpa" de que Roses sea ahora la ciudad más cara es atribuible al comprador francés que ha vuelto a adquirir con ganas propiedades de segunda residencia en la zona tras un período a la baja a raíz de la pandemia.

El comprador francés tiene, en general, disponibilidad económica y no depende de la financiación hipotecaria 

Miquel BoschPresidente del Gremi de Promotors i Constructors d'Edificis a Girona

"No solo ha ocurrido en Roses, sino también en otros puntos del Alt Empordà como Empuriabrabva y l'Escala", explica Miquel Bosch, presidente del Gremi de Promotors i Constructors d'Edificis de Girona. 

Se trata de un perfil de comprador distinto, que se caracteriza por un alto poder adquisitivo. "Tienen disponibilidad económica y no se mueven por los tipos de interés ni dependen de la financiación hipotecaria", esgrime Bosch. 

Su apuesta no solo ha sido por la obra nueva -en la que hay más demanda que oferta, según el sector- sinó también por la compra de viviendas de segunda mano. El presiente del Col·legi d'API de Girona, Joan Company, ejemplificaba el "efecto del mercado de segunda residencia"  en Roses.

En 2021 se realizaron en Roses, con 20.000 habitantes censados, un total de 708 operaciones de compraventa, mientras que en Girona capital, con un censo cinco veces superior, fueron 724. La localidad del Alt Empordà es la segunda ciudad de la provincia con una mayor proporción de compraventas en función del total de viviendas, solo superada por Platja d'Aro. 

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Una pareja observando el escaparate de una inmobiliaria en Lloret de Mar.

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Company destaca el aumento de precios de la segunda mano en general en todas las localidades costeras, donde el precio medio del metro cuadrado se ha encarecido, de media, alrededor de un 5% en la segunda mejor zona. 

Un área geográfica, a costera, en la que tiene un peso destacado el mercado de segunda residencia de alto poder adquisitivo y que "no está tan vinculada a la financiación hipotecaria", según explica Company. 

Recuperación

Las transacciones realizadas en 2022 se sitúan a cifras parecidas a las de 2007

Según datos del Colegio de Registradores de España, durante el tercer trimestre, el 27'76% de las operaciones de compraventa realizadas en la provincia de Girona tenían como protagonistas a extranjeros. Una cifra parecida a la registrada en 2018. Durante la pandemia, las compras a extranjeros habían caído hasta el 21%. 

Las transacciones realizadas en 2022 se sitúan a cifras parecidas a las de 2007. Solo durante el tercer trimestre se efectuaron 4.038 operaciones, un 3'6% más que en el tercer trimestre del año anterior. 

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El aumento de precios se ha notado en Roses, en la imagen el canal de Santa Margarida, así como en otros municipios costeros del Alt Empordà como L'Escala y Castelló d'Empúries

Pere Duran/Nord Media/Archivo

El cómputo interanual el crecimiento ha sido mayor. Se han realizado 14.526 compraventas, un 23% más que en el mismo periodo del año anterior. 

Una mayor demanda que se explica no solo por la recuperación del mercado tras la pandemia sinó también porqué muchos compradores optaron por avanzar sus compras antes de la subida de los tipos de interés.

Menos obra nueva

Bosch subraya que este año se han construido menos edificios y apartamentos, entre un 18% y un 20% menos que en 2021 y sin embargo, las ventas han sido un 25% superiores a hace un año.

Una reducción que atribuye a varias causas como la dificultad de conseguir financiación por parte de los promotores, la duración en la obtención de licencias, al encarecimiento del precio de los materiales o a la falta de mano de obra calificada.

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Construcción de una vivienda unifamiliar en Alp (Cerdanya), en una imagen de archivo.

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Una ralentización en la construcción que Bosch augura que puede provocar "problemas de abastecimiento del mercado" en los próximos meses. Un precio, el de la obra nueva, que ha sido inferior al de la inflación y, de momento, inferior también a la evolución de precios de segunda mano. 

Alquiler disparado

El último informa de los API, el Gremi de Promotors i Constructors d'edificis de Girona y del Col·legi d'Administradors de Finques de Girona constata también el incremento del precio del alquiler, que ronda el 10% de media en pisos de dos y tres habitaciones. 

En la capital, Girona, y en localidades de interior, el precio está por encima de ese 10%. En el caso de Girona, en octubre de 2022 el precio era un 11'6% en comparación al mes de octubre del año anterior. Alquilar un piso de dos habitaciones en la capital cuesta ya 698 euros.

Dos habitaciones, 698 euros

En la ciudad de Girona el alquiler se ha encarecido un 11'6% en un año; un piso de 2 habitaciones cuesta ahora 698 euros, de media

Un aumento que Francesc Xavier Quintana, presidente del Col·legi d'Administradors de Finques de Girona, atribuye a la falta de oferta y también a algunos cambios normativos que ha llevado a algunos propietarios a fijar un precio más elevado del alquiler para contrarrestar los efectos de la inflación. 

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