Encuentran más de 450 especies fósiles de fauna marina en el yacimiento de Odèn
Descubrimiento arquológico
Corresponden a un período de hace entre 240 y 237 millones de años y los peces son el grupo más abundante
Investigadores del Intitut Català de Paleontologia Miquel Crusafont (ICEP), de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) y de la Universitat de Barcelona (UB) acaban de publicar un artículo en el Journal of Paleontology donde describen más de 450 especies de fósiles que corresponden al límite del Triásico medio superior, de hace 240 y 237 millones de años. Provienen del yacimiento de Odèn, en el Solsonès, y el estudio ha revelado que los peces son el grupo más abundante, junto con especies que podrían ser nuevas para la ciencia. Eso se debe a que, durante la época del Triásico, lo que hoy conocemos como la zona montañosa del Solsonès antes era un mar de aguas cálidas y poco profundas.
En Catalunya, los yacimientos de este periodo son bastante escasos. Destacan los de Montral-Alcover y Mora d’Ebre-Camposines, ambos en Tarragona. Y los del Pirineo, Odèn y el de Vilanova de la Sal, en la Noguera.
Los investigadores de ICP y el coautor de la investigación, Josep Fortuny, explican que los peces son el grupo más abundante encontrado en el yacimiento de Odèn, “con centenares de especies recuperadas”. La especie más abundante es el Peltopleurus cf. Nuptialis, un pez pequeño típico de este tipo de ecosistemas y que también ha aparecido en yacimientos suizos e italianos. Se trata de una especie particular, sobre la cual destaca su dimorfismo sexual, es decir, las diferencias que presentan los machos de las hembras.
Además, se han identificado otras especies de peces menos abundantes en el yacimiento como los Saurichthys, una especie con un hocico y cuerpo alargado que recuerda a una anguila. También han encontrado Colobodus giganteus, un pez que podría medir más de medio metro de longitud y que se ha encontrado en el yacimiento de Montral-Alcover, además de un miembro no identificado del grupo de los halecomorfos. Estos últimos, según Fortuny, fueron muy abundantes en su época, a pesar de que los ejemplares recuperados de Odèn están actualmente en estudio y no se descarta que se trate de una nueva especie para la ciencia.
Aunque los peces son el grupo más frecuente en este yacimiento, también se han identificado restos de dientes y costillas de reptiles marinos. En especial de braquiópodos, unos invertebrados que recuerdan a las bivalvas por su forma, pero que no son de su misma especie. También se han encontrado ejemplares de Pseudocorbula gregaria, una especie de bivalvas.
La fauna y la geología que encontramos en este yacimiento nos hace pensar en un ambiente submareal de baja energía, es decir, de aguas relativamente tranquilas”, concluye Fortuny. Las condiciones de ausencia de oxígeno en los sedimentos probablemente contribuyeron en la conservación de estos fósiles.