La nueva edición del Pla de Barris de Barcelona tratará de poner el acento principalmente en la educación y en la accesibilidad. De esta manera durante los próximos cuatro años el Ayuntamiento de la capital catalana invertirá alrededor de 300 millones euros con el objetivo de hacer posible 315 proyectos diseminados por hasta 23 barrios de la ciudad. El alcalde Jaume Collboni, junto con Lluís Rabell, su concejal especialmente encargado del Pla de Barris, y también y el gerente de la empresa municipal Foment de Ciutat, Àlex Montes, quiso aprovechar las circunstancias para presumir de acción de gobierno y escogió el muy vistoso Saló de Cent del Consistorio como escenario de la presentación de estos proyectos municipales.
“Hace ya dieciocho años que el Ayuntamiento de Barcelona comenzó a organizarse de manera oficial en barrios –proclamó la mañana de este martes el propio alcalde Collboni con toda la solemnidad que la ocasión requería–, y podemos sentirnos muy orgullosos de los resultados, del alcance de tantas transformaciones, de que de esta manera la prosperidad haya podido acercare a tantos lugares de Barcelona. Con esta edición del pla de Barris pasamos de 23 a 27 barrios y de seis a siete distritos. Más de 400.000 ciudadanos se beneficiarán de estas inversiones. El Pla de Barris es básicamente una herramienta para luchar contra las desigualdades desde abajo, desde los casales y demás equipamientos, a pie de calle”.
El alcalde destaca que el número de barrios beneficiados por el nuevo plan pasa de 23 a 27
El alcalde Collboni también celebró la decisión del Govern de la Generalitat de recuperar la Llei de Barris. El alcalde no pretende únicamente obtener ayudas de la administración autonómica. También está bien dispuesto a compartir la experiencia atesorada por Barcelona durante los últimos lustros. De hecho, Collboni quiso subrayar que ya tuvo las primeras conversaciones con el Govern con el objetivo de obtener recursos económicos en el marco de la nueva normativa y de este modo mejorar la financiación de muchos proyectos del Ayuntamiento que ya dieron sus primeros pasos gracias a las anteriores ediciones del Pla de Barris. “Nos hemos puesto a la cola”, aseguró el alcalde.
Sí, el espíritu del Pla de Barris siempre fue el de mejorar la calidad de vida de la gente mediante una larga retahíla de pequeños proyectos que, si bien nunca se antojaron especialmente espectaculares, sí que tuvieron siempre efectos en las vidas cotidianas de muchos vecinos. De este modo, por ejemplo, durante los próximos cuatro años, gracias a una inversión de unos siete millones de euros, el Ayuntamiento rehabilitará los cinco centros educativos públicos de la zona norte del distrito de Nou Barris a fin de adaptarlos al nuevo formato de instituto escuela y de este modo reforzar la continuidad educativa y frenar el abandono escolar. “Esto funciona –prosiguió el alcalde Collboni–, las políticas públicas dan resultados concretos en términos de lucha contra las desigualdades y la segregación social de la ciudad. En las zonas donde se desarrolla el Pla de Barris el índice de vulnerabilidad se reduce en un 3%. Hablamos de unos datos muy relevantes que de ninguna manera son fruto de la casualidad”. Además, el Ayuntamiento prevé construir un nuevo centro de formación de adultos en el barrio del Besòs i el Maresme, mejorar los patios escolares de esta zona y también proyectar varias guarderías en los barrios de la Marina, el Raval y el Besòs, actuaciones que contarán con una aportación de 11,5 millones de euro del Consorci d’Eduació de Barcelona.
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“La primera evolución de impacto realizada por el Institut Metropòli muestra que desde el año 2016 se ha reducido el abandono prematuro de los estudios en 8,1 puntos en los barrios beneficiados con el Pla de Barris, un porcentaje que dobla al registrado en el resto de barrios de Barcelona”. El alcalde Collboni también quiso destacar que una docena de bibliotecas municipales estarán abiertas durante los meses de agosto y también durante las vacaciones de Navidad. La medida pretende echar una mano a los estudiantes durante sus vacaciones y de paso reforzar la red de refugios climáticos de Barcelona. Este mismo año se incluirán en esta iniciativa las bibliotecas Francesca Bonnemaison, la de Sant Pau, la de Roquetes, la de la Zona Nord, la de Trinitat Vella y la del Besòs i el Maresme, y posteriormente se añadirán la de Adnreu Nin, la de la Barceloneta, del Poble Sec, la Francesc Candel, la del Carmel y también la del Bon Pastor.
En lo que se refiere al espacio público, Collboni aseguró que las reformas se abordarán desde un punto de vista inclusivo, teniendo muy en cuenta el género, la edad y el origen. A este respecto el alcalde anunció las reurbanizaciones de las calles Pepe Rubianes y Princesa y también de la plaza Vuit de Març y del entorno del nuevo CAP del barrio Gòtic, así como la apertura de un nuevo parque en el Camí del Rec, en Trinitat Vella.
En vivienda y rehabilitación, se reforzarán las actuaciones previstas en el marco del Pla Viure, desplegando el programa de fincas de alta complejidad, impulsando las rehabilitaciones en pro de la eficiencia energética y promocionando el trabajo comunitario para reforzar la convivencia y la red vecinal.
Finalmente, en salud, bienestar y comunidad, Collboni destacó el apoyo a los programas de soledad no deseada en los barrios del Carmel, Verdum, la Zona Nord de Nou Barris, la Prosperitat y la Trinitat Nova, que trabaja principalmente con mujeres de más de 70 años que viven solas y que ampliará su mirada a los adolescentes y mujeres migradas.
Más de 320 chavales participan cada semana en las actividades de La Besonense
Nuevas estampas en el Besòs
Alrededor de 320 chavales participan ya cada semana en las actividades deportivas de La Besonese, de las remozadas pistas de Francesc Abad, en los barrios del Besòs. Se trata de una de tantas aparentemente pequeñas iniciativas hechas ahora realidad gracias a la anteriores ediciones del Pla de Barris. Hablamos en verdad de una propuesta destinada a fomentar la cohesión social y mejorar a convivencia en los barrios más periféricos del norte de Barcelona. Más del 70% de estos chavales con edades comprendidas entre los 4 y los 21 años son migrantes. Aquí juegan al fútbol, al baloncesto, al voleibol, al críquet... y también disponen de un aula de estudio. Al parecer los padres de los chavales también están encantados.
