No hubo una segunda prórroga. Los aranceles anunciados –y aplazados un mes– por Donald Trump del 25% a todas las importaciones de México y Canadá entraron en vigor ayer a la medianoche, provocando una fuerte caída en los índices bursátiles de Norteamérica y el mundo. La única excepción será el petróleo y el gas canadiense, a los que se aplicará una tasa inferior, del 10%. Tanto la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, como el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, anunciaron la imposición de medidas recíprocas. Ottawa contraatacó de inmediato imponiendo aranceles del 25% sobre bienes por valor de 30.000 millones de dólares, que se extenderán a 125.000 millones a finales de este mes. México tiene previsto concretar su respuesta este domingo.
En paralelo, también se hizo efectiva la segunda ola arancelaria contra China, cuyas importaciones estarán gravadas a partir de ahora con tasas adicionales del 20%, el doble de las del 10% ya en vigor desde febrero.
Minutos después de su aplicación, el Ministerio de Finanzas chino anunció aranceles recíprocos del 15% a las importaciones de pollo, trigo, maíz y algodón procedentes de Estados Unidos, así como del 10% a las de “sorgo, soja, carne de cerdo y vacuno, productos acuáticos, frutas, verduras y productos lácteos”.
Los gravámenes a México y Canadá suponen la vulneración unilateral del tratado que firmaron los tres países durante el primer mandato de Trump (el T-MEC, del año 2020, que sustituyó al NAFTA, de 1994). Harán saltar por los aires tres décadas de integración y tendrán efectos devastadores en el corto plazo sobre las tres economías: más del 80% de las exportaciones anuales de México terminan en EE.UU., mientras que las importaciones desde el norte representan el 40% de su total. Por su parte, Canadá exporta alrededor del 76% de sus productos a su vecino del sur, e importa desde allí el 56% del total.
Los inversores reaccionaron con una venta masiva. El S&P 500 comenzó a caer el lunes, cuando Trump confirmó que ya no había marcha atrás, con pérdidas del 1,8%, su mayor caída este año, y siguió ayer corrigiendo a la baja tras la apertura de los mercados financieros, con resonancias en los mercados asiáticos y europeos.
China y Canadá contraatacan con aranceles recíprocos y México anunciará su respuesta el domingo
El inquilino de la Casa Blanca, que dio anoche en el Capitolio el primer discurso del estado de la nación de su segundo mandato, tenía previsto explicar sus medidas al pueblo estadounidense, al que prometió en campaña devolver a EE.UU. su “era dorada” y atajar la inflación, los efectos contrarios a los que prevén los expertos con sus aranceles.
Trump pretende con estos gravámenes atajar el déficit comercial, pero también forzar cambios en las políticas migratorias y contra el tráfico de fentanilo de los países afectados. Se prevé que los aranceles –una tasa adicional que paga el importador, aunque Trump los vende como un “impuesto” a los terceros países– provoquen un fuerte aumento de precios para los consumidores estadounidenses. Pero sus efectos serán especialmente dañinos para las empresas exportadoras de México y Canadá, que perderán su mercado de referencia.
Su entrada en vigor estaba originalmente prevista para el 4 de febrero, pero Sheinbaum y Trudeau los evitaron tras llamar al magnate y comprometerse a aumentar su inversión en la seguridad de las dos fronteras. El secretario de Comercio, Howard Lutnick, argumentó que, aunque México y Canadá habían hecho “un buen trabajo con la frontera”, ninguno de los tres países, incluida China, ha hecho un esfuerzo suficiente como para frenar el tráfico de fentanilo. Los precursores de este opioide, que en el 2023 mató a más de 70.000 personas en EE.UU., suelen llegar desde el gigante asiático, procesarse en México y entrar al país por la frontera sur.
Esto ha llevado a Trump a aplicar a sus dos vecinos un castigo similar, a pesar de que la diferencia de entradas irregulares de inmigrantes y de fentanilo es abismal. El año pasado, se incautaron cerca de 10 toneladas de fentanilo en la frontera con México, pero tan solo unos 20 kilos en la frontera canadiense.
Las economías de los tres países norteamericanos están plenamente integradas en sectores como la automoción, en cuyo proceso de producción los vehículos cruzan varias veces las dos fronteras. También es importante el intercambio de productos agrícolas, por lo que se espera que las nuevas tasas lleven a aumentos en la cesta de la compra de los ciudadanos estadounidenses. En el 2023, cruzaron ambas fronteras productos por valor de más de 1,5 billones de dólares.
El republicano vulnera con sus gravámenes el acuerdo comercial que negoció en su primer mandato
China, Canadá y México, los tres mayores socios comerciales de EE.UU., son los tres primeros países específicamente afectados por los gravámenes, en una guerra arancelaria que ya se expande a todo el mundo y se ampliará en las próximas semanas. El republicano ya reimpuso las tasas del 25% que aplicó en su primer mandato al acero y el aluminio (que entran en vigor el 12 de marzo), y firmó otra orden ejecutiva para implantar “aranceles recíprocos” a todo el mundo. Estos aranceles, que en el caso de la Unión Europea avanzó que serán “del 25%, en términos generales”, está previsto que entren en vigor el próximo 2 de abril.