La Haya pisa fuerte en la investigación sobre la guerra entre Israel y Hamas en Gaza y los ataques terroristas del pasado 7 de octubre. El fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, solicitó ayer a los jueces la emisión de órdenes de detención contra el primer ministro israelí, Beniamin Netanyahu, y su ministro de Defensa, Yoav Gallant, así como contra la cúpula de la organización terrorista islámica por crímenes de guerra y de lesa humanidad.
La Casa Blanca calificó de “escandalosa” la decisión de la Fiscalía y arremetió contra sus “implicaciones” de “equivalencia” entre Israel y Hamas. De acceder a la petición, la posición internacional del Estado hebreo quedaría seriamente dañada para continuar su ofensiva militar y obtener armas. Aunque Israel no reconoce la autoridad de la corte, los 123 países que sí lo hacen estarían obligados a detener a su líder si este viajara a su territorio. El desenlace de estas solicitudes, ahora en manos de la cámara prejudicial, determinará el futuro de la justicia internacional, afirma el fiscal Khan. La Fiscalía, que investiga la situación en Gaza desde el año 2021, dice tener pruebas y “motivos razonables” para pensar que Netanyahu y Gallant tienen “responsabilidad penal” en “crímenes de guerra y de lesa humanidad” cometidos en el territorio palestino desde el 8 de octubre por hechos entre los que destacan “la hambruna deliberada entre los civiles como método de guerra”, y “ataques deliberados contra la población civil”.
Biden considera “escandalosa” la petición y protesta por la “equivalencia” entre Israel y Hamas
Estos crímenes forman parte de “un plan” y se han cometido “en prolongación de un ataque generalizado y sistemático contra la población civil palestina” y, en algunos casos, “se siguen cometiendo”, afirma el fiscal antes de recordar la dramática situación humanitaria en la franja y sus reiterados llamamientos para permitir la llegada de ayuda. Las pruebas analizadas incluyen entrevistas con víctimas, testigos directos, documentos audiovisuales, imágenes por satélite y declaraciones de miembros de grupos que han cometido los crímenes.
El tono del comunicado es grave. Khan –que consultó las conclusiones de su equipo con un panel estelar de juristas internacionales, que las avaló “unánimemente”– es muy consciente del peso que tiene su decisión. Reitera que la Fiscalía “actúa dentro de su mandato bajo el Estatuto de Roma” y que su trabajo se ha guiado por “la obligación de investigar por igual las pruebas incriminatorias y exculpatorias” y el empeño por “separar las alegaciones de los hechos”. “La ley internacional y las leyes sobre conflictos armados se aplican a todos por igual. Ningún soldado raso, ningún comandante, ningún líder civil, nadie puede actuar con impunidad”, dice. Y, aunque Israel tiene derecho a defender a su población, “eso no le absuelve” de sus obligaciones con el derecho internacional, y los “medios elegidos” para conseguir sus objetivos militares “son criminales”.
En el mismo comunicado, la Fiscalía anunció que también ha pedido órdenes de arresto internacional contra Yahya Sinwar, el jefe militar de Hamas en Gaza; Mohamed Diab Ibrahim al Masri, comandante en jefe de las Brigadas Al Qassam, el brazo militar de la organización, así como Ismail Haniye, jefe de la oficina política de Hamas, a quienes atribuye “responsabilidad penal” por varios “crímenes de guerra y contra la humanidad” cometidos en el territorio de Israel y el Estado de Palestina desde el 7 de octubre del 2023, la fecha del brutal atentado que costó la vida a 1.200 ciudadanos del Estado judío y la toma de unos 245 rehenes. La solicitud de órdenes de arresto se basa en hechos que incluyen el asesinato de cientos de civiles, secuestros, violaciones y otras formas de violencia sexual y torturas.
“Durante mi visita a los kibutz de Be’eri y Kfar Aza y al lugar del festival de música Supernova, pude constatar la devastación causada por estos ataques y las repercusiones profundas de estos crímenes inconcebibles”, narra Khan en el citado comunicado, publicado en inglés, francés, árabe y hebreo, en el que el fiscal reivindica en términos emotivos que “estos actos crueles e inhumanos no pueden quedar impunes”.
La Fiscalía lanzó ayer un hondo alegato en defensa de la justicia internacional. “Si nuestra aplicación de la ley se percibe como selectiva, habremos contribuido a su hundimiento. Este es el riesgo real al que nos enfrentamos en este momento crucial”, avisa Khan, que llama a demostrar “colectivamente” que el derecho internacional humanitario “se aplica imparcialmente a todas las partes en un conflicto armado en todas las situaciones sometidas a mi Fiscalía y a la corte. Así podremos demostrar que todas las vidas humanas valen lo mismo”.
Netanyahu lo califa de “absurdo”
El primer ministro israelí reaccionó a última hora de la tarde de este lunes a través de un mensaje grabado que calificó el anuncio de “absurdo” y que va dirigido contra todo Israel. Según Netanyahu, es un ejemplo del “nuevo antisemitismo” que se ha trasladado de los campus universitarios al sistema de justicia.
También lo acusó a Karim Khan de comparar a los soldados israelíes con “los monstruos” de Hamas y que es una “completa distorsión de la realidad”.
“¿Con qué autoridad osas comparar a los monstruos de Hamás con los soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF, en inglés), el ejército más moral del mundo?”, dijo el mandatario.