El periodista estadounidense detenido Evan Gershkovich, corresponsal en Moscú del periódico The Wall Street Journal (WSJ), reapareció este martes ante el Tribunal de la Ciudad de Moscú, que rechazó la apelación de la defensa contra su arresto.
Era la primera aparición pública de Gershkovich desde su arresto a finales de marzo en Yekatimburgo, la principal ciudad de los Urales.
Es el primer periodista de EE.UU. detenido por espionaje en Rusia desde la guerra fría
Las autoridades rusas le imputan cargos por espionaje, lo que conlleva una sentencia de 20 años de prisión. El periodista, al que se vio en silencio, sonriendo y con los brazos cruzados en la jaula de cristal destinada en los juzgados rusos a los acusados, niega rotundamente la acusación.
La audiencia de este martes trataba únicamente una cuestión de procedimiento, para decidir si Gershkovich debía seguir detenido hasta el juicio. Sus abogados pidieron cambiar la medida cautelar de dos meses de prisión preventiva por arresto domiciliario. Además, anunciaron la disposición de la empresa Dow Jones, propietaria del WSJ, de pagar una fianza de 50 millones de rublos (unos 560.000 euros).
No se entró a tratar, sin embargo, la acusación que pesa contra él, es decir, si había espiado para Estados Unidos, investigación sobre la cual el FSB sigue trabajando.
Gershkovich “defenderá el derecho a hacer periodismo”, dice su abogada
El tribunal de apelación dictaminó “dejar sin cambios la decisión del tribunal de primera instancia sobre la medida cautelar en forma de arresto para Gershkovich”, anunció el juzgado.
Tras esta decisión, Gershkovich seguirá en prisión preventiva en la cárcel de Lefórtovo de Moscú hasta al menos el 29 de mayo. Sin embargo, debido a las graves acusaciones en su contra, es muy previsible que la justicia rusa vaya prolongando ese régimen hasta el inicio del juicio por espionaje.
Gershkovich es el primer periodista de Estados Unidos detenido en Rusia con cargos de espionaje desde el fin de la guerra fría.
“La acusación no se basa en nada y seguiremos exigiendo a Rusia que le libere”, dice la embajadora de EE.UU.
El último caso se produjo el 2 de septiembre de 1986, con la URSS todavía en pie, pero cuando la perestroika estaba dando sus primeros pasos. El KGB detuvo a Nicholas Daniloff, corresponsal en Moscú de la revista US News & World Report, y le acusó de robar secretos de Estado.
Tanto The Wall Street Journal como el Gobierno de EE.UU. han negado que Gershkovich esté implicado en actos de espionaje y han pedido su liberación inmediata.
Durante la audiencia de este martes, en la sala estuvo presente la embajadora estadounidense en Moscú, Lynn Tracy, que un día antes pudo visitarle en prisión.
Evan Gershkovich, de 31 años, llegó el 29 de marzo a Yekaterimburgo, capital del óblast de Sverdlovsk y del Distrito Federal de los Urales, y ese mismo día dejó de comunicarse con su periódico. Horas después, el Servicio de Seguridad Federal (FSB) desvelaba que sus agentes le habían detenido por cargos de espionaje que conllevan una posible sentencia de 20 años de prisión, una acusación que el periodista niega rotundamente. Estados Unidos pide su liberación inmediata al considerar que ha sido “detenido injustamente”.
Según la versión de las fuerzas de seguridad rusas, había estado recopilando “información que constituye un secreto de Estado sobre las actividades de una de las empresas del complejo militar-industrial ruso”. Había sido detenido “cuando intentaba obtener información secreta”.
Sus conocidos dijeron, por el contrario, que el periodista trabajaba en un artículo sobre la actitud de la sociedad hacia el Grupo Wagner, la compañía de mercenarios rusos que está combatiendo en Ucrania junto a las tropas regulares rusas.
Según su abogada Tatiana Nózhkina, Gershkovich sigue rechazando los cargos que le imputan. “Defenderá el derecho a hacer periodismo, está bien y agradece a todos el apoyo”, señaló.
“La acusación no se basa en nada y seguiremos exigiendo a Rusia que le libere”, aseguró, por su parte, la embajadora Tracy.